A BARCA VELLA TOTHOM HI FA ESTELLA
El 13 de septiembre de 1867, Barclay, Curle & Co., de Glasgow, botaban en las gradas de Stobcross el número 164, un vapor con casco de hierro y propulsado por hélice para el servicio costero de carga y pasaje nombrado GREATA. Su O.N. era 56930.
Su primer armador fue Carron Company (otras fuentes citan The Carron Company. 1759-1983), de Grangemouth, quienes lo registraron el 5 de noviembre de 1867.
En 1888 figura en el Lloyd´s a intereses de Napier Shipping (Lawrence Glen como manager), de Glasgow, y, para nuestro conocimiento, el buque se viene a la contraseña nacional el año 1891, siendo renombrado VICENTE SANZ para intereses de Cola y Maicas, del comercio de Valencia.
En 1906 pasa a la naviera La Roda Hermanos, y como todos los compañeros de flota se integra en la Compañía Valenciana de Vapores Correos de África. Se muere el 27 de febrero de 1914, incendiado, mientras estaba fondeado en la rada de Melilla (Fuente: The Clyde Built Ships)
Sus características técnicas, según el Lloyd´s Register of Shipping: Año 1904-05, eran las siguientes:
…”VICENTE SANZ; ex GREATA; vapor a hélice con casco de hierro; señal distintiva: JTQN; luz eléctrica; tipo: Well deck; 2 cubiertas corridas; registro bruto: 584,0 toneladas; under deck: 562,0; registro neto: 288,0 toneladas; armador: La Roda Hermanos; matricula de Valencia; eslora entre perpendiculares: 192,3 pies; manga: 28,0 pies; puntal en bodega: 15,1 pies; castillo de proa de 26 pies de extensión; maquina compound de dos cilindros; diámetro: 31 y 53 pulgadas; carrera: 36 pulgadas; 121 caballos nominales; construida por Barclay, Curle & Co.”…
Debemos decir que esta máquina no era la original, habiendo sido construida en 1871.
Su vida marítima en nuestra contraseña está muy referenciada en las hemerotecas y es muy accidentada. Veamos cuales fueron sus aventuras.
La primera noticia sobre este vapor la da el diario La Dinastía, de Barcelona (8/3/1891, página 3) en que anuncia la llegada del VICENTE SANZ a Barcelona, desde Valencia.
La línea que hacía, generalmente de Cartagena a Valencia y Barcelona con extensiones por ambos extremos, era la llamada de los “vapores a domicilio”, por la forma en que recogían y entregaban los equipajes de los viajeros.
De Cartagena solían traer ganado, carga típica y que implicaba a varios buques. Según La Vanguardia, en su edición del jueves, 18 de junio de 1891, en su página 6, el VICENTE SANZ también participaba en estos fletamentos:
…”De Cartagena, 27 horas, vapor VICENTE SANZ, 356 toneladas, capitán Badia, con 1,195 cabezas ganado lanar á varios señores y 13 pipas vino a la orden”…
La máquina, y en concreto el eje de cola, eran la parte vulnerable de estos viejos screws y el VICENTE SANZ no era una excepción. Estuvo a punto de perderse en su primer año con la matrícula de Valencia. Lo narra El Día, de Madrid, en su edición de 6 de noviembre de 1891, página 2, en que cita:
…”Salvamento del vapor VICENTE SANZ.
La prensa de Barcelona nos comunica interesantes datos referentes al salvamento de este buque, realizado hace pocos días por el vapor CATALUÑA, de la Compañía Trasatlántica, en su viaje de regreso de Buenos-Aires.
El citado trasatlántico se dirigía á las cuatro de la tarde del domingo hacia dicho puerto, luchando con las embravecidas olas, con objeto de llegar á él antes de que cerrara la noche.
Hallándose casi á la altura de la farola de Llobregat, divisó cerca de la costa, en situación bastante critica, á un buque, en cuyo palo trinquete tenía colocada la bandera demandando pronto auxilio, y en el mayor la de remolque.
El CATALUÑA, con mar á través y teniendo que defenderse del fuerte NO. que reinaba, y prescindiendo por completo del peligro que podía correr, se acercó al buque que en aquellos momentos era juguete de las olas, y una vez puesto al habla, supo que era el VICENTE SANZ que estaba sin gobierno por habérsele descompuesto la máquina.
El CATALUÑA pidió al otro buque que amarrara un bote, trayéndole un cabo, a fin de poder establecer comunicación entre ambos vapores.
Una vez efectuada esta operación, y no teniendo el VICENTE SANZ el calabrote necesario para ser remolcado, se le facilitó por el CATALUÑA, que consiguió sacarlo mar adentro, sosteniéndose en esta forma, y luchando con el temporal hasta la madrugada del 28, en que pudieron entrar en Barcelona el CATALUÑA y el VICENTE SANZ, habiendo soltado el primero el remolque por haber el VICENTE SANZ hecho durante la noche las reparaciones más importantes en su máquina.
Digna de encomio es la conducta seguida por el capitán del CATALUÑA, pues á no haber sido por el pronto auxilio que prestó al VICENTE SANZ, no hubiera tardado mucho tiempo en estrellarse este buque contra la costa.
Reconociéndolo así el capitán del VICENTE SANZ ha dirigido al Diario de Barcelona la siguiente carta:
Sr. Director del Diario de Barcelona;
Muy señor mío: El infrascrito, capitán del vapor VICENTE SANZ, en nombre propio y en el de sus tripulantes, por medio de su acreditado periódico hace público su mayor agradecimiento al capitán D. Antonio Genis, del vapor-correo CATALUÑA, de la Compañía Trasatlántica, por su noble proceder al darles el más eficaz auxilio el día 25 del corriente, que se hallaba el VICENTE SANZ en situación altamente comprometida, cerca de la costa de semáforo del Llobregat, á causa de una avería en la máquina.
Hechos humanitarios, como el del capitán Sr. Genis, son el mejor timbre para la historia del marino, y honran á la casa naviera que cuenta con tan buenos servidores.
Soy de V. su más atento S. S. Q, B. S. M. –Pablo Badia”…
El Sr. Pablo Badia fue capitán vitalicio del buque en sus primeros años de vida marítima en nuestra contraseña. El buque, como ya hemos dicho, hacia la línea de Barcelona a Cartagena, y en la prensa se anunciaba de la siguiente manera:
…”Servicios fijos semanales entre Barcelona, Tarragona, Valencia, Cullera, Gandía y Cartagena.
Servicio de Gandía en combinación del ferrocarril de Gandía á Alcoy. Prestan este servicio los vapores VICENTE SANZ, CERVANTES y SANTIGA.
Salidas los miércoles y sábados. Se admiten pasajes y carga, de domicilio á domicilio, á precios reducidos. Se espiden conocimientos directos para Alcoy, Concentaína, Muro, Beniavies, Lorcha, Villalonga, Potries y Gandía.
Informará la señora Viuda de Vicente Sanz Selma, Paseo Colón, 35”…(Fuente: La Vanguardia: Edición del viernes, 14 abril 1893, página 8)
Estuvo a punto de perderse en 1895, a causa de un incendio. Lo narra el diario La Unión Católica, en su edición de 25 de enero de 1895, en su página 2:
…”En el puerto de Tarragona ha entrado el vapor VICENTE SANZ con fuego á bordo, que se había iniciado en la bodega. En vista de las grandes proporciones del incendio y de la imposibilidad de dominarle, el capitán ha dispuesto inundar el buque. Han salido en su socorro las bombas del puerto, que con la tripulación trabajan sin descanso por dominar el siniestro”…
Mas extenso es el reportaje del diario La Iberia, de Madrid, en su edición de 28 de enero de 1895, página 3, en que cita:
…”El vapor VICENTE SANZ, que hace días salió de Valencia con dirección á Tarragona y Barcelona, sufrió un incendio en alta mar que puso en peligro la vida de los que á su bordo iban, así como la completa destrucción de la carga y del buque mismo.
El capitán del buque, Sr. Badía, y los individuos de la tripulación empezaron desde luego á trabajar activamente en la extinción del fuego, logrando, al cabo de grandes esfuerzos, que éste no tomara mayor desarrollo, y llegando al fin al puerto de Tarragona.
Una vez allí, las bombas de las obras del Puerto auxiliaron en sus trabajos á la tripulación, dejando, por último, extinguido el fuego.
Por fortuna no ha ocurrido ninguna desgracia personal. Parece que las pérdidas materiales no son cuantiosas.
El VICENTE SANZ era esperado el sábado en Barcelona”…
En ese mismo año da apoyo a un buque de su misma compañía. Lo narra El País, de Madrid, en su edición de 16 de abril de 1895, página 2, en que apunta:
…”Averías en un vapor. Valencia, 15 (10,30m.).—El vapor PEREZ, que salió el sábado de Barcelona con 200 pasajeros, ha sufrido una avería de consideración.
Al llegar frente á Vinaroz estallo el pistón de la caldera, y el buque se vio obligado á pedir auxilio.
El vapor VICENTE SANZ, que hacía igual viaje que el barco averiado, acudió en socorro del PEREZ y le arrojó dos cables.
Hasta Valencia ha venido remolcado por el VICENTE SANZ.
Ambos buques fondearon anoche á las ocho. La llegada de ambos vapores produjo inmensa alegría entre las familias de los tripulantes y de los pasajeros, los cuales sufrían la ansiedad y zozobra consiguientes”…
En el año 1897, según parece ser, el servicio pasa a ser trisemanal, y los vapores empleados son el VICENTE SANZ, el CERVANTES y el CANALEJAS. (Fuente: La Vanguardia: Edición del sábado, 17 julio 1897, página 8)
En estos años es capitan del buque D. Francisco Garcia.
Otro grave incidente con la maquina le ocurrió en el año 1898. Lo narra La vanguardia, en su edición del viernes, 15 de julio de 1898, en su página 3:
…”Ayer por la tarde, á poco de haber zarpado de este puerto con dirección al de Valencia el vapor «VICENTE SANZ», sufrió la explosión de un tubo de las calderas, debiendo ser remolcado otra vez hasta el puerto, donde quedó para reparar las averías”…
Le sustituyo el CERVANTES, amarrado en aquel momento en Valencia.
En 1902 es causante de un abordaje. Lo narra el diario El País, de Madrid, en su edición de 6 de abril de 1902, en su página 2:
…”A consecuencia de la espesa niebla que reinaba en el mar, el falucho MARIA, de la matrícula de Malgrat, fue echado á piqué, frente a Sagunto por el vapor VICENTE SANZ, que se dirigía á nuestro puerto, procedente de Valencia.
El MARIA iba con rumbo á Alicante, con cargamento de objetos da barro y otros artículos.
Llevaba a bordo cinco hombres de tripulación, que fueron recogidos por el VICENTE SANZ”…
Un servicio diferente al habitual lo realiza en 1902, al tocar Mao. Lo confirma La Dinastía, de Barcelona, en su edición de 24 de mayo de 1902, en su página 2:
…”Con motivo do hallarse adelantados los trabajos de reparación del dique que fue construido para Subic, ayer tarde salió para Mahón A bordo del vapor «VICENTE SANZ» el ingeniero naval nombrado por el Gobierno para que una vez terminados aquéllos proceda á su reconocimiento y dirija las pruebas necesarias del mismo, y si el resultado es satisfactorio poder admitirlo”…
Y es que, como consecuencia de tener que reparar el ISLA DE MENORCA, La Marítima fletó a partir del 20 de mayo de 1902 y para cubrir su lugar al “VICENTE SANZ.
Este fletamento se repitió en agosto de 1907, en que el VICENTE SANZ volvía a sustituirle al tener que pasar un severo recorrido y otras reparaciones generales.
El mando en estos años era del capitán don Juan B. Fábregues.
En 1908 seguía en la línea Barcelona-Cartagena, teniendo esta vez como compañero al VICENTE FERRER.
El 13 de enero de 1910 fondeaba el vapor “VICENTE SANZ” en Mao, procedente de Barcelona, fletado de nuevo por La Marítima por el tiempo de un mes para suplir a los correos de la flota propia que debían de subir a dique para pasar el recorrido anual (Fuente: Buenaventura Menorca)
A finales de julio de 1910 es enviado a hacer servicios en el estrecho de Gibraltar, lo que comportaba transportes de tropas, material de guerra y efectos, a lugares de carga y descarga que eran realmente peligrosos. En esa zona acabo su vida marítima.
En 1913 el VICENTE SANZ es convertido en buque ambulancia. Desde el verano de ese año efectúa frecuentes servicios con grupos de aproximadamente cien enfermos y heridos entre las plazas fuertes africanas. Lo confirma el diario La Época, en su edición del viernes 12 de julio de 1913, en su página 1:
…”Buque Hospital en Valencia. Valencia 11.
Por disposición del ministro de la Guerra ha sido convertido en Hospital el vapor VICENTE SANZ, de la Compañía de Correos de África.
Está dotado el buque de cien camas y todos les elementos imprescindibles para que cumpla la finalidad mencionada.
Las calderas están encendidas, y el buque espera órdenes para zarpar cuando se le indique”…
En 1914 se pierde definitivamente. Se incendia mientras estaba anclado en la rada de Melilla.
Lo narra el diario El Siglo Futuro, en su edición del sábado 28 de febrero de 1914, en su página 3:
…”Fuego en el «VICENTE SANZ». Melilla 28. -A las nueve de la noche se produjo un incendio en las carboneras del vapor VICENTE SANZ, atracado en el muelle Fiorentina, para embarcar las fuerzas que van destacadas a los peñones.
La tripulación se salvó y el fuego fue dominado en las últimas horas de la noche.
Melilla 28. -El incendio del VICENTE SANZ se debió al desprendimiento de gases de la carbonera de babor, que originaron una explosión é incendiaron el carbón almacenado.
El capitán D. Francisco García Dutruch, auxiliado por la tripulación, hizo funcionar las bombas mangueras, intentando anegar las carboneras, pero sin lograrlo.
El fuego invadió casi instantáneamente la popa del buque, comenzando á arder todo él.
Grandes llamaradas impedían los trabajos.
Desde los primeros momentos acudieron las autoridades militares y de Marina.
El general Jordana dispuso que prestaran auxilio las tropas que fueran necesarias.
El vapor VIRGEN DE AFRICA remolcó al buque incendiado hasta dejarlo junto al muelle de Florentina, y el crucero EXTREMADURA le disparó varios cañonazos intentando echarlo á pique sin poderlo conseguir dado el poco calibre de los proyectiles.
La tripulación no pudo salvar nada por haber acudido primero y principalmente á sofocar el fuego, habiéndolo advertido demasiado tarde, lo que le permitió tomar rápidamente tanto incremento.
El personal de la compañía de Mar, los bomberos de Melilla y la brigada contra incendios del crucero EXTREMADURA trabajaron denodadamente, en unión de la tripulación del SANZ, para impedir que el fuego se propagara á la bodega de proa, que contiene 150 toneladas de carbón.
Esta madrugada penetraron á bordo del SANZ el capitán Sr. García, los oficiales y los tripulantes, conducidos por un bote del EXTREMADURA, logrando salvar los aparatos de radiotelegrafía.
Botaron dos botes que tenía á proa y fondearon otra ancla para evitar que el buque virara sobre el muelle y quedó allí embarrancado”…
El buque se declaró pérdida total constructiva. Lo atestigua el diario El Siglo Futuro, en su edición del martes 3 de marzo de 1914, en su página 1:
…”Los peritos náuticos han reconocido el vapor VICENTE SANZ, declarándolo inservible.
El buque sé halla anegado y embarrancado en la playa, procediéndose á retirar la maquinaria aprovechable”…
Para reemplazar al VICENTE SANZ la Compañía Valenciana de Vapores Correos de África designo al GENERAL FERNANDEZ SILVESTRE.
Todavía en 1918 se recuperaban restos del derrelicto.
Con posterioridad a este, hubo otro vapor llamado VICENTE SANZ, perteneciente a la compañía Salinas y Schaffer.