EL MARINER MENJA BRUT, PERO TE´N POTS FIAR
Terminada la guerra civil española y comenzada la segunda guerra mundial, ocurrió en nuestro país algo parecido a lo ocurrido durante la Gran Guerra. La diferencia estuvo en que, a diferencia de entonces, los beneficios no fueron tan pingües y el país no se encontraba en condiciones más que de autoabastecerse. Faltaban materias primas, mano de obra especializada y tecnología. Como la necesidad es la madre del ingenio, aparecieron de nuevo pequeños astilleros que trabajando la madera, y sacando de donde podían pequeños motores diésel o semi-diesel, consiguieron crear una gran flota de pequeños motoveleros que tuvieron su momento de gloria en los años de la miseria; uno de ellos fue el PEDRO GALIANA.
Según la L.O.B. del año 1965, sus características técnicas eran las siguientes:
…”Señal distintiva: EGFP; 2ª Lista. Carga. Casco de madera; registro bruto: 123 toneladas; registro neto: 93; carga máxima: 170 toneladas; peso muerto: 180; eslora máxima: 24,00 metros; eslora entre p.p.: 23,10; manga: 6,62; puntal de construcción: 3,35; botado en 1943 por la Constructora Naval de Castelló; armador: R. Torné B. y otros; matricula: San Carlos de la Rápita; motor semi-diesel de 170 ehp; velocidad en carga: 7,5 nudos; combustible: gas-oil; consumo por singladura: 0,3 toneladas; calado máximo: 2,9 metros; seguro: Registro Español”…
En su primer armamento lucio la contraseña de Vicente Traver Urios y la matrícula de Castelló.
En el principio de su vida marítima hizo navegación costera por el Sur y Este de la Península, tocando con frecuencia Sevilla y puertos del Norte de África.
Era un motovelero de dos palos y antes de su compra –en 1948- por el que sería su armador definitivo llego a tener la matrícula de Burriana.
En 1948, como ya hemos dicho, lo adquiere Ramón Torné, y otros capitalistas indeterminados, de Sant Carles de la Rápita, quienes lo matriculan en este puerto, donde aparece en el folio 53, en la Lista 2ª.
El motor que llevaba era un Volund y lo mandaron los patrones rapitencs Josep Castellá y Francesc Foix, entre otros (Fuente: Naufragis a la Mar de L´Ebre. Autor: Lluis Millan i Roca)
A partir de este armamento, los viajes son limitados a la costa de Levante peninsular. Los primeros años -hasta 1951 aproximadamente- los hace dedicado al flete del arroz de Sant Carles a Barcelona, y, posteriormente, supongo que debido a la incipiente competencia del camión y el tren, los dedica al flete pobre; sal desde el Sur a Barcelona, y cemento desde Vallcarca a Ses Illes, Valencia y Alicante, con viajes ocasionales a Ceuta y Almería. La tierra industrial también es otro de los fletes habituales.
En el año 1962 se le desmonto el palo de popa, tomando la apariencia de una motonave de madera. Con la llegada de los años sesenta, y la modernización del cabotaje fue quedando sin fletes y fue amarrado en Sant Carles hasta su hundimiento y pérdida.
Su último viaje –según las hemerotecas- se produce a finales de 1968, pero hasta el año 1972 sigue apareciendo en la L.O.B.