ARREBOLES A LA ORACIÓN, MAÑANA SOL
En septiembre de 1892, el acorazado PELAYO y los buques de la Armada española pertenecientes a la escuadra de instrucción se desplazaron a Génova con motivo del cuatrocientos centenario del descubrimiento de América. Las dársenas de aquel puerto se llenaron con unidades de guerra de muchas flotas del mundo, y el PELAYO dio buena fe de la presencia de España. Mandaba el PELAYO el capitán de navío Sr. Dueñas, nombrado hacia unos días, y la Escuadra estaba al mando del contralmirante señor Zoilo Sánchez de Ocaña y Vieitiz.
En la prensa fue ampliamente narrado, y, desde estas líneas, haremos un resumen de lo acaecido.
Parte de la composición de las flotas la adelantaba el diario La Época, en su edición del miércoles 24 de Agosto de 1892:
…”Manifestación naval en Génova.
Según los acuerdos tomados hasta el día por las diversas naciones, he aquí la composición de las fuerzas navales que irán a Génova en el mes de Septiembre próximo:
Italia. -Primera división. —Acorazados MOROSINI, AFFONDATORI; crucero-torpedero PARTHENOPE; aviso torpedero SAETTA.
Segunda división. -Acorazados CASTELFIDARDO y SAN MARTINO; acorazado-torpedero GOITO.
Tercera división.-Torpederos ARIETE, ETNA y VESUBIO; cruceros torpederos MONZANBANO, y torpederos AGUILA, FALCO, AVOLTOIO y NIBBIO.
Cuarta división. -Acorazados LEPANTO, ITALIA, ANDREA DORIA, DUILIO, ÁNCONA y los demás torpederos de la escuadra.
España. -Acorazado PELAYO; fragata acorazada VICTORIA; crucero REINA REGENTE; cañonero TEMERARIO.
Inglaterra. -Acorazados VICTORIA, SANS PAREIL, NILE y COLLINGWOOD; cruceros AUSTRALIA, PHAETON, SCOUT; aviso SURPRISE.
Japón. -Acorazado MATSHUSIMA.
Austria enviará una escuadra, cuya composición no es aún conocida, como no se sabe tampoco los buques que enviarán Alemania, los Estados Unidos, la República Argentina y Francia”…
Como se ve, el acto conmemorativo era de gran importancia, y las circunstancias en la colonia de Cuba sin duda hacían interesante la presencia de las flotas española y americana en Génova.
Más adelante, el mismo diario La Época, del lunes 29 de agosto de 1892, citaba:
…”Un telegrama de nuestro servicio particular nos anuncia que esta tarde ha zarpado del puerto de Cádiz, con dirección a Génova, la escuadra española, compuesta del acorazado PELAYO, la fragata VITORIA, los cruceros ALFONSO XII y REINA REGENTE, y el caza-torpedero TEMERARIO.
Sin forzar la velocidad estos barcos, llegarán á Génova del viernes al sábado. El TEMERARIO se destacará del grueso de la escuadra para anunciar la llegada en aquel puerto de Italia, y a fin de que se disponga con tiempo lo necesario para la maniobra del arribo”…
En el diario El Bien Público, en su edición de 1 de septiembre de 1892, se leía:
…”La escuadra de instrucción compuesta del acorazado PELAYO, los cruceros REINA REGENTE y ALFONSO XII, la fragata VITORIA y el crucero torpedero TEMERARIO, salió de Cádiz el martes (30-8-1892) en dirección a Barcelona, y debe hallarse en Génova el día 4 del presente mes”…
Durante su estancia en Génova, el PELAYO fue visitado por el rey de Italia. Lo narra el diario El Isleño, en su edición de 20 de septiembre de 1892, en que cita:
…”El Rey de Italia en el PELAYO.
Al revistar el rey Humberto en el puerto de Génova las escuadras estrangeras reunidas con motivo del centenario de Colon, ha distinguido mucho a la española.
S.M. comenzó la revista de las escuadras por la francesa, teniendo en cuenta que la Republica es vecina de Italia, sin duda alguna. La acogida hecha al rey ha sido respetuosa.
Después se dirigió el soberano al sitio que ocupaban los barcos españoles, y subió a bordo del acorazado PELAYO, donde fue recibido con los honores de ordenanza.
El monarca y su sequito –dicen de Génova- han permanecido durante tres cuartos de hora en el hermoso acorazado español, revelando en su conversación que profesa especial simpatía a nuestra patria y que aprecia grandemente el valor de nuestros marinos.
Ha pronunciado frases muy lisonjeras para España y ha expresado su admiración por la reina regente, durante cuyo gobierno goza nuestra patria profunda paz.
A petición del rey Humberto le han sido presentados todos los comandantes de buque, la plana mayor y los oficiales del PELAYO.
S.M. demostró tanta complacencia durante su estancia en este, que examino detenidamente el acorazado, hizo que funcionara la torre giratoria de estribor, y elogio mucho las novedades que observo en el barco, y especialmente en el cañón Hontoria.
Antes de retirarse expreso su gratitud por el cariñoso entusiasta recibimiento que se le ha hecho, y dijo que España debe ocupar lugar preferente en cuantos homenajes se tributen a la memoria del descubridor de América”…
Las fiestas acabaron con éxito, según narra el diario El Liberal, de Madrid, en su edición de 16 de septiembre de 1892 en su página 1:
…”Las Fiestas de Génova. (Por telégrafo)
Banquete de periodistas. Génova, 16.
Anoche se celebró un nuevo banquete, ofrecido por la prensa italiana a los periodistas extranjeros. Reino en el una franca alegría y se proclamaron entusiastas brindis por la felicidad y prosperidad de Italia y las naciones allí representadas.
Marcha de les reyes. Génova 15.
A las once y cinco minutos de la noche partió el tren real para Monza, «conduciendo a los reyes de Italia, príncipe de Nápoles, conde de Turín y altos personajes de su séquito.
En la estación despidieron a las reales personas los príncipes de Mónaco, el cuerpo diplomático aquí residente, los almirantes de las escuadras extranjeras y una multitud enorme que no cesaba de aclamar la familia real.
El rey Humberto entregó a las autoridades 50.000 francos para que sean repartidos entre los pobres, como recuerdo de su visita.
La Comisión del Ayuntamiento de Barcelona ha entregado igualmente para socorros 1.500 francos.
El alcalde de Génova ha publicado una alocución al pueblo, dando á éste, en nombre del rey, gracias por la conducta patriótica demostrada con motivo de las fiestas celebradas.
A bordo del LEPANTO. Génova, 15.
Los almirantes é individuos del Estado Mayor de todas las escuadras han asistido á una brillante fiesta a bordo del acorazado italiano LEPANTO. En dicha fiesta ha reinado la mayor cordialidad y cortesía entre los marinos de las diferentes naciones.
La escuadra española. Génova 16 (9,10 n.).—Vengo de visitar el acorazado PELAYO. La escuadra española zarpará mañana, a las diez de la misma”…
La vuelta a Barcelona –el 18-09-1892- de la escuadra de instrucción la narraba La Vanguardia en su edición del lunes, 19 de septiembre de 1892, en su página 2:
…”Procedente de Génova llegó en la mañana de ayer a este puerto, la escuadra de instrucción, compuesta por el acorazado «PELAYO», los cruceros «REINA REGENTE» y «ALFONSO XII» la fragata «VITORIA» y el caza-torpedero «TEMERARIO». De todos ellos, excepto del último, tenemos dados extensos detalles al lector, lo cual nos releva de entrar ahora en pormenores acerca de dichos buques de guerra, que tan visitados fueron, unos, el año 1891, y en Mayo último todos ellos.
Respecto del «TEMERARIO», basta decir que es un cañonero torpedero que sirve de aviso a la escuadra, recordando mucho su plantar al «DESTRUCTOR», también conocido en detalle por nuestros lectores, con motivo de haber estado cuando aquí Su Majestad la Reina vino a visitar la Exposición Universal de Barcelona. El «TEMERARIO», es mandado por el teniente de navío don Leopoldo de Hacar, su tripulación se compone de 69 individuos; monta seis cañones y desplaza 571 toneladas.
Los citados buques fondearon en la escollera del E., próxima a la torre está la «VITORIA», y siguen en orden el «PELAYO», el «ALFONSO XII», el «REINA REGENTE» y el «TEMERARIO».
Como es de rigor, tanto estos buques, corno las baterías del castillo de Montjuich, dispararon las correspondientes salvas.
El comandante de Marina de esta provincia pasó a las nueve a bordo del «PELAYO», para visitar al contralmirante de la escuadra, señor Sánchez Ocaña, quien bajó á tierra acompañado del comandante de Marina, y visitó al Capitán general interino don Joaquín Ahumada. Este devolvió la visita por la tarde, a bordo del «PELAYO», al contralmirante.
Muchas fueron las personas que a los muelles y a la escollera acudieron por la mañana y por la tarde, para contemplar los buques de la escuadra”…
Tras los actos de Génova, y su vuelta a España, la escuadra de instrucción quedo descompuesta tal y como narra el diario El bien Público, en su edición de 18 de noviembre de 1892:
…”La escuadra de instrucción ha quedado por completo desmembrada, pues mientras el acorazado PELAYO ha zarpado de Cádiz con rumbo a Ferrol, los cruceros ALFONSO XII y REINA REGENTE llegaron el martes último a Cartagena y el cazatorpedero TEMERARIO a Valencia, la fragata VITORIA se halla en el Arsenal de Cartagena para proceder a su desarme”…
En efecto, el PELAYO entro en dique en Ferrol, en donde aparte del normal recorrido se encontró la necesidad de efectuar reparaciones en las calderas que fueron estimadas, en un principio, en 70.000 pesetas.