EL QUE SE PIERDE EN AGUA PEQUEÑA SE AHOGA EN LA GRANDE
Pasando Queenstown el 29 de abril de 1883, y llegando a Sandy Hook el 6 de mayo, tras 6 días, 23 horas y 48 minutos, el vapor de la compañía Guion Line, ALASKA, con una velocidad media de 17,05 nudos, batía su propio record por tercera vez, y mantenía el gallardete azul, el conocido Blue Ribband, que le coronaba como el rey del Atlántico Norte.
Se lo quito al GERMANIC en 1882, y no lo cedió hasta abril de 1884, en que el OREGON se lo arrebataba, haciendo un promedio de 18,56 nudos. Debe notarse que esta velocidad era la media en Europa para los trenes expresos de larga distancia. El avión era todavía una quimera. No es de extrañar que buques y capitanes se hicieran famosos y apareciesen regularmente en los diarios.
Esta hazaña tenia como contrapartida un consumo espectacular y antieconómico; 250 toneladas de carbón al día. El buque lo construyo John Elder & Company, en Govan Escocia. Fue botado el 15 de junio de 1881 y desguazado en 1902. Dos años después de que la Compañía Trasatlántica lo devolviese a sus armadores, en 1897, se pensó en desguazarlo, pero fue revendido a los astilleros que lo construyeron para ser usado como barracón flotante hasta su desguace, en 1902, como ya hemos dicho.
Curiosamente, cuando se retiro de la carrera del Atlántico Norte por Guion Line en 1894, había realizado su viaje numero 100.
La Compañía Trasatlántica lo fleto a finales de 1896 y lo renombro MAGALLANES.
Antiguamente un buque casi siempre iba ligado a un capitán. Hubo cantidad de estos que prácticamente fueron vitalicios de sus vapores, en los que, como consecuencia de ello, conocían lo bueno y lo malo de sus buques y los explotaban en las mejores condiciones. La Compañía Trasatlántica no fue un ejemplo de estas prácticas, y, según lo que yo he podido ver, sus capitanes rotaban con relativa frecuencia de vapor a vapor. Tampoco era fácil subir en el escalafón de la que fue la mejor naviera del Estado, pero los acontecimientos bélicos en las colonias, que consumían lo mejor de la juventud del país, hicieron que esta compañía tuviese que ampliar su flota de manera desproporcionada, dando la oportunidad de ser capitán de hecho a muy buenos oficiales. El MAGALLANES solo estuvo unos pocos años en la contraseña, y, desafortunadamente, fue por imperativos militares.
Rafael González Echegaray, en su libro Capitanes de Cantabria, publicado en 1970 por la Diputación Provincial de Santander, nos introduce en el estudio de este fantástico capitán y su no menos impresionante buque: …”El ALASKA, uno de los más famosos galgos del mar de la Guión Line, que se hiciera famoso en las dramáticas pugnas nor-atlánticas de fines de siglo, dormitaba frío y apagado en el otoño de 1896 en Garelochhead, en las aguas del Clyde que le vieran nacer quince años antes.
Estaba amarrado desde el mes de Abril, tras un historial estupendo de cien viajes exactos a Nueva York desde Liverpool con promedios de 17 nudos. Fue el primer barco del mundo que tardó menos de una semana en dar el gran salto del charco, con su hermano gemelo el ARIZONA.
Pero la Guión Line, la famosa Guión de 1866 fundada por Stephen Barker Guión, estaba herida de muerte con estos sus últimos lebreles que consumían 250 toneladas diarias del mejor carbón de Gales, y en 1896 suspendió pagos.
Era el ALASKA un barco enorme, de 530 pies de eslora, 50 de manga, con cuatro palos y dos chimeneas; con proa recta y castillo y toldilla de ballena y una larga superestructura central con cubierta de botes. Tenía dos hélices, registraba 6.392 toneladas y desplazaba 12.000, y sus alojamientos eran capaces para 500 pasajeros de cámara y 3.000 de transporte. Se construyó en 1881 por John Elder, en Glasgow, y entró en servicio en 1882.
Pero en aquel verano de 1896 las cosas en Cuba iban rápidas, Weyler había pedido treinta y cinco mil hombres más para su ejército y una real orden de 20 de agosto programaba su embarque cuando viene a producirse la insurrección filipina con demanda inevitable de hombres y barcos para aquel nuevo y lejano escenario de guerra.
Don Claudio López, que se ha visto privado de sus mejores buques trasatlánticos puestos en activo como cruceros-auxiliares, compra primero, en 1895, cinco grandes unidades en el extranjero, a las que siguen otras cinco más y finalmente cierra el lote el ALASKA, de la Guión Line.
Fue pues el ALASKA, la última adquisición del lote de transportes de guerra con que la Trasatlántica contribuyó al esfuerzo del país para acabar con la insurrección colonial. Se compró en Londres exactamente el 29 de Octubre de 1896 y el 16 de Noviembre siguiente zarpaba del Clyde bajo el mando del capitán santanderino don Ángel Casquero y Ostolaza. (después veremos, según las hemerotecas, que seguramente no fue asi)
Casquero, la verdad, aunque capitán de título, porque en la flota de Comillas todos los oficiales habían de serlo reglamentariamente, no era lo todavía efectivo en el escalafón de la empresa. Era tan sólo Primer Oficial y estaba mandando el yate de don Claudio; el FERNANDO POO. Este barquito construido en Paysley por Fullerton en 1885 para el Marqués de Monroy con el nombre de QUINTA HERMOSA, había sido adquirido por Trasatlántica en 1890 para los servicios de enlace entre las posesiones del Golfo de Guinea, y de forma incidental hacía las veces de yate -para lo que en efecto había sido construido- del Presidente de la Compañía. Por su escaso porte su mando era destino de Primer Oficial de la flota, y por eso lo tenía entonces Casquero.
Pero el estirón fabuloso de los once gigantescos transportes, dio una corrida general al escalafón y los nombramientos de capitanes interinos se produjeron en abundancia. Casquero tenía entonces 37 años, -lo mejor de la vida,- con unas facultades y un historial envidiable.
El ALASKA, se desperezó de su amarre, encendió sus innumerables hornos, y se vino a España a sus buenas 16 millas; directo a Cádiz y Barcelona. Su primer viaje bajo los colores nacionales y la contraseña azul de la bola blanca lo inició el 15 de Diciembre, llevando a su bordo los batallones 9° y 10° de refuerzo para Filipinas, embarcados en Cádiz.
El viaje de estreno del galgo atlántico al mando de Casquero fue bien penoso, porque en pleno Océano Índico surgieron los primeros brotes de peste entre la tropa y a la llegada a Singapur el MAGALLANES, que tal fue el nombre español del buque, hubo de sufrir una larga y enojosa cuarentena antes de concluir su viaje en Manila.
Aun dio otro viaje a las Filipinas. Pero el 12 de Julio de l897, el capitán Casquero, por orden de la gerencia, trasbordaba en aguas de Cádiz y tomaba el mando del gran correo REINA MARÍA CRISTINA, que ya había sido devuelto para entonces por la Armada, aunque conservando su artillería principal consistente en cuatro piezas del 120. El mando del CRISTINA era una prueba del crédito ganado por el capitán santanderino en los duros años de la insurrección”…
No comprendo donde puede estar el error o la equivocación, pero según parece ser, según las hemerotecas, el primer capitán fue el Sr. D. Jerónimo Galiana. Así lo atestigua el diario La Epoca, edición de 7 de noviembre de 1896, núm. 16.678, pagina 2, en que se lee: …”La Compañía Trasatlántica. Entre la flota de vapores que la Compañía Trasatlántica dispone para la próxima expedición á Cuba, se cuenta el magnifico vapor ALASKA, que ha sido comprado recientemente á la Compañía Guion, en la que ha hecho el servicio desde Liverpool á Nueva York.
El ALASKA ha sido bautizado por la Trasatlántica con el nombre de MAGALLANES, tiene 7.000 toneladas y es útil para el transporte de 3.000 personas entre pasaje y tripulación.
El MAGALLANES hará su primer viaje como correo de la Trasatlántica, saliendo próximamente del puerto de Cádiz conduciendo diez compañías de las que se organicen en la primera región.
El mando de este magnifico trasatlántico lo ha confiado la Compañía al entendido marino y antiguo capitán de la casa, D. Jerónimo Galiana.
La misma Compañía, por iniciativa del señor marqués de Comillas, y de acuerdo con los jefes de Sección del Ministerio de la Guerra, Sres. Arana y Bascaran, tiene el proyecto de proveer por su cuenta de ropas de abrigo á los soldados enfermos que embarquen en Cuba, para que al llegar á altas latitudes no sufran de molestias del frió”…
Otra referencia al buque la hace el diario La Epoca, edición de 16 de noviembre de 1896, núm.16.687, pagina 1, en que leemos: …”Un nuevo vapor de la Trasatlántica. Londres 16.- Los periódicos ingleses anuncian esta mañana que el magnífico y grandioso vapor ALASKA, adquirido por la Compañía Trasatlántica de Barcelona, ha salido ya del Clyde (Escocia) con rumbo á España.
Dicho buque, que será el de mayor porte de la Compañía, cambiará su nombre por el de MAGALLANES”…
Otra referencia al vapor aparece en el diario La Dinastia, de Barcelona, edición de 28 de noviembre de 1896, pagina 2, en que leemos: …”Próximamente llegará á este puerto para embarcar tropas con destino á Filipinas el vapor MAGALLANES (antes ALASKA), el más grandioso y de mayor velocidad que há adquirido recientemente la Compañía Trasatlántica”…
Sobre el terrible primer viaje que hizo, con destino a Filipinas, hay muchas referencias en la prensa escrita. El diario La Iberia, edición de 12 de diciembre de 1896, pagina 2, cita: …”El vapor MAGALLANES, que se halla abanderado en Cádiz, y que saldrá para Filipinas el martes 15 conduciendo tropas, será reconocido el lunes por una comisión de Marina, á cuyo efecto han sido nombrados para presidente el capitán de navío D. Rafael Micón y como vocales un señor ayudante de aquella capitanía, el perito mecánico Sr. Carbó y otros”…
Por su parte El Correo Militar, edición de 17 de diciembre de 1896, pagina 2, anota: …”El vapor «MAGALLANES», que debía salir hoy de Cádiz para Filipinas, ha recibido orden de no zarpar hasta recibir un millón y pico de cartuchos para fusiles Maüser, cuya remesa se calcula que pueda llegar mañana mismo á dicha capital”…
Otra anotación aparece en el diario La Correspondencia de España, edición de 18 de diciembre de 1896, núm.14.196, pagina 3, que cita: …”Mas tropas para Filipinas. Cádiz 17. 1,15 t. Han embarcado los batallones expedicionarios números 9 y 10, organizados en Sevilla y Cádiz, y de los que forman también parte algunos soldados del batallón de Segorbe, que presta sus servicios en Jerez.
Durante el embarque no cesó de llover. El tren llegó con retraso. Se trasladaron a bordo varias parejas de guardia civil para evitar que los soldados, en vista de que el vapor MAGALLANES no zarpara hasta mañana, bajen a tierra, donde se halla la mayoría de las familias de aquéllos. Muchas mujeres fueron acometidas de sincope.
Se han producido escenas sentidas é indescriptibles. Esta noche llegaran las municiones que conducirá el MAGALLANES a Filipinas”…
De la lectura de estos apuntes se aprecia la tremenda carga que suponía para las familias la existencia del Imperio en una nación pobre como España. Su pérdida fue un alivio para la mayoría de la población que solo sufría la carga de una corte madrileña miope y una casta militar, ridícula y rancia, incapaz de comprender los deseos de los nativos en las posesiones de ultramar. Desafortunadamente aun quedaba el mal trago de las posesiones africanas.
El primer viaje citado por Rafael González Echegaray fue realmente terrible. El diario La Union Catolica, edición de 26 de diciembre de 1896, pagina 3, cita: …”Según telegrafían de Port-Said, el vapor MAGALLANES sufrió un terrible temporal, resultando un soldado y un tripulante muertos, y varios heridos”…
El diario La Epoca, edición de 27 diciembre de 1896, núm.16.727, pagina 2, anota: …”El vapor MAGALLANES. Anoche dimos noticia de la llegada á Port-Said del vapor MAGALLANES, y de que á consecuencia de un terrible temporal, habían muerto un soldado y un individuo de la tripulación.
Además resultaron gravemente heridos otros dos tripulantes.
Los pasajeros del MAGALLANES indican que á no haber sido por la temeridad y pericia del capitán D. Jerónimo Galiana, el barco hubiera naufragado.
En Port-Said reinaba ayer inquietud por la tardanza del COLON, que también conduce tropas.
El diario El Dia, edición de 10 de enero de1897, pagina 2, cita: …”De Cádiz. Telegrafían á El Imparcial desde Cádiz, que aún no ha llegado el vapor SAN IGNACIO, que conduce 168 soldados enfermos de Cuba, y que se creo que tal retraso obedece á los temporales reinantes.
Al corresponsal del citado diario ha comunicado uno de los pasajeros del vapor MAGALLANES los siguientes detalles acerca del temporal sufrido por el citado buque:
«Las olas destrozaron todo cuanto había sobre cubierta, llevándose el ganado y los aljibes.
Un carpintero que se ocupa en remediar averías fue destrozado por un golpe de mar. Además ha habido un soldado muerto y ocho heridos. También han sufrido lesiones, más ó menos graves, catorce tripulantes.
El MAGALLANES lleva más de dos mil personas y no necesita decirse el pánico que entre ellas se desarrollo.
Se hacen grandes elogios del capitán y de la tripulación, que, con verdadero heroísmo y sangre fría, consiguieron dominar la apurada situación.
Una vez pasado el peligro, se dijo á bordo una misa en acción de gracias.
Las olas rompieron las lumbreras, llegando las aguas á las cámaras.»
El COLON y otros barcos han sufrido también desperfectos á causa del temporal”…
No acabaron en las condiciones atmosféricas del momento las tribulaciones del MAGALLANES. En el diario La Epoca, edición de 12 de enero de 1897, núm. 16.742, pagina 2, leemos: …”El vapor «MAGALLANES»
En Manila se recibió ayer un telegrama de Colombo, solicitando que el vapor ISLA DE MINDANAO saliera al encuentro del MAGALLANES, por haber ocurrido á bordo de este buque tres casos de sarampión.
Al MAGALLANES le ha sorprendido un violento temporal antes de llegar á Colombo. Según telegrafían los jefes de los batallones que se dirigen á Manila en el expresado buque, los individuos que sufren sarampión han sido aislados y se han adoptado á bordo otras precauciones sanitarias”…
Mas detalles aparecen en el diario La Epoca, edición de 22 de enero de 1897, núm.16.752, pagina 3, en que leemos: …”Alguna alarma ha producido también, explotada por los pesimistas, el telegrama que publica El Imparcial sobre casos de enfermedad ocurrida en el vapor MAGALLANES, que navega con rumbo á Filipinas con más de 2.500 soldados.
Lo ocurrido, según informes exactos, es lo siguiente: En la navegación de Suez á Colombo presentáronse algunos casos de sarampión y otros de fiebre tifoidea, casi todos entre la tripulación del buque y los menos en las tropas de trasportes. El capitán del vapor telegrafió á la compañía, y por orden de ésta salieron para Singapoore desde Manila el ISLA DE MINDANAO y ELCANO para que, recogiendo á su bordo parte de las tropas, pudiera ser desinfectado el MAGALLANES.
Así se ha hecho: al ISLA DE MINDANAO se han trasladado 1.017 hombres, y los enfermos quedan en el ELCANO convenientemente asistidos.
El MINDANAO y el MAGALLANES llegarán en breve á Manila.
En la noche del miércoles fondeó en dicho puerto el COLON con 2.100 hombres.
Desagradable es lo ocurrido, pero no tiene las proporciones que algunos le han dado, y es el primer incidente de esa índole que se presenta en el transporte de 160.000 hombres á Cuba y 25.000 á Filipinas. En otras expediciones realizadas por ingleses y franceses ha habido más casos semejantes”…
Imaginen los lectores el tremendo golpe que debía ser para la moral de los soldados estos incidentes.
Otro grave incidente, esta vez un abordaje, le ocurrió al MAGALLANES en Cádiz. Según el diario La Renaixensa, editado en catalán, del día 1 de junio de 1897, pagina 9, en el que traducimos: …”En los periódicos de Cádiz encontramos los siguientes detalles sobre el accidente marítimo ocurrido en aquella bahía entre los vapores BERENGUER EL GRANDE y MAGALLANES: «Ayer por la mañana, antes de las diez, ocurrió en esta bahía un accidente marítimo de relativa importancia.
A esa hora hacia su entrada en la bahía el trasatlántico de 2.446 toneladas BERENGUER EL GRANDE, de la casa F. Prats y Compañía, de Barcelona, procedente de Málaga.
El barco debió salir anoche de nuestro puerto hacia Canarias y escalas hasta La Habana.
La velocidad del trasatlántico, según los que le vieron entrar, no era mucha, y venia maniobrando con toda normalidad.
Ya dentro de puntas buscaba el fondeadero cerca del acorazado EMPERADOR CARLOS V, y se fue sobre el vapor MAGALLANES, de la Compañía Trasatlántica, que se encontraba allí anclado.
Según parece ser, el abordaje debió ocurrir por el defectuoso funcionamiento del timón, y la topada de los dos buques no tuvo la importancia que se creyó en un principio, gracias á la inteligencia del capitán del «BERENGUER» señor Larrañaga y del práctico que iba a bordo, uno de los mas antiguos y expertos de esta corporación.
Los dos barcos han resultado con averías; el «MAGALLANES» las sufrió en la popa, en donde se hundieron varias planchas y quedo destrozada parte de la obra muerta.
Las del «BERENGUER» son en la proa y también de bastante consideración.
Se dice también que la tripulación del barco, que la forman 47 hombres, hizo todo lo que pudo para evitar el abordaje, y que cuando vio la posibilidad del abordaje dio fondo a las dos anclas, sin que esto lograse evitarlo.
Por suerte no han ocurrido desgracias personales”…
Si alguien ha navegado, y ha sido responsable en el puente, sabe lo que debieron sentir estos marinos.
Por fin, en el año 1897, el buque vuelve a dejar nuestra contraseña. El diario La Renaixensa, edición de 22 de julio de 1897, pagina 10, anotaba: …”El vapor «MAGALLANES» que había sido contratado por la Compañía Trasatlántica para llevar tropas á Filipinas, ha salido ya de Cádiz hacia Liverpool para ser devuelto a la casa armadora inglesa”…
El ALASKA fue diseñado por William Pearce.