EL MARINERO DE LEY, UNA MANO PARA SI, OTRA PARA EL REY
Las unidades ALSEDO, VELASCO y LAZAGA pertenecieron a una serie de tres pequeños destructores; los únicos four stackers de la Armada.
Siempre que comienzo un artículo sobre buques de guerra menciono que no soy un especialista en este sector. Si aficionado, porque me gusta la tecnología, pero en cambio la vida operacional de estos buques me interesa poco, como todo lo militar. Debido a esto, este articulo, sobre estos bonitos destructores, se limitara a unos apuntes sobre su construcción y sobre su estética. En la red, sobre todo en Wikipedia, se tiene su vida operacional, y en el mercado hay numerosos libros, de muy buenos autores, que narran su vida militar.
El club de las cuatro chimeneas fue selecto, especialmente entre los liners, de los que solamente se construyeron, creo, quince unidades para Alemania, Francia e Inglaterra. En cambio, en la marina de guerra, fueron relativamente abundantes, siendo un ejemplo muy conocido, por la terrible tragedia que representaron, los bellos HOGUE, CRESSY y ABOUKIR. Incluso hubo proyectos de buques con una cantidad inmensa de ellas. El proyectado crucero de batalla LEXINGTON, en su primer diseño, tenia, ni más ni menos, que siete. El record de chimeneas, a bordo de un destructor, lo tuvo el HMS VIKING, construido por Palmer´s Shipbuilding, con un total de seis de ellas. Otro icono de la construcción naval fue el crucero ASKOLD, con cinco hermosísimas chimeneas, en caída, una autentica maravilla de una belleza estética inmensa. Hablando de destructores, un libro interesante es Destroyers. An Illustrated History, escrito por Anthony Preston y editado por Parkgatebooks en 1998, su ISBN es 1-90261-601-4. Es un repaso genérico a la historia de estos.
Si hubo una clase de destructores de cuatro chimeneas, por antonomasia, esos fueron los americanos construidos al final de la Gran Guerra. Pertenecientes a las series CALDWELL, WICKES y CLEMSON, fueron construidos en 6, 111 y 156 buques respectivamente. Es decir, en total 273 unidades, conocidas popularmente como “Four stackers” o “Flush deckers”, apodo que describía sus características como buques de cuatro chimeneas y cubierta corrida. Esta ultima característica, muy bonita estéticamente, se mantuvo en la U.S. Navy hasta los destructores lanzamisiles de la clase CHARLES F. ADAMS. Si hay un libro magnifico sobre estos buques de cuatro chimeneas, ese es Flush Decks & Four Pipes, escrito por John D. Alden.
La clase ALSEDO estuvo basada, según parece ser, en la clase LIGHTFOOT inglesa. En principio se planearon seis unidades, pero la llegada de los CHURRUCA, mucho más efectivos, acabo con estos planes. Sobre la gestación de estos buques, en el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1915, se lee: …”2º Programa Naval. Destroyers.- En virtud de la ley y el contrato antes citados, que autorizaban la construcción de seis destroyers, se pidió a la Sociedad, por el Ministerio de Marina, la presentación de proposiciones para la construcción de algunos de estos buques.
La Sociedad remitió a la Superioridad planos y especificaciones de diferentes tipos de destroyers de los últimamente construidos, facilitando al mismo tiempo, cuantos elementos de juicio fueron necesarios para el mejor estudio de estos buques.
Examinados estos proyectos, fue aprobado el proyecto “C” de un destroyer de unas 1.150 toneladas de desplazamiento, proyectado por las firmas que nos prestan su garantia tecnica y que llevan construidos varios buques de este tipo.
Decidida la clase de destroyer, presento la Sociedad proposición, que fue aceptada, para construir conforme a lo dispuesto en la ley, el primer grupo de estos buques en el Arsenal de Cartagena, recibiendo la orden de construcción de tres destroyers en 7 de abril del año actual”…
En el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1916, se anotaba: …”2º Programa Naval. Nuevos destroyers.- Esta terminado el trazado de estos buques, hechos los despiezos en el modelo y pedidas las primeras partidas del material para los cascos”…
En el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1917, se anotaba: …”Nuevos destroyers.—Se está acopiando el material de acero para los cascos de estos buques, el que está en fabricación por la Sociedad Altos Hornos de Vizcaya”…
Y es que, en estos años de la Gran Guerra, la escasez de materiales estratégicos supuso un duro golpe para fiabilidad en los plazos de entrega de esta serie. Así, pasaban los años, y los retrasos se acumulaban. En el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1918, se anotaba: …”Sumergibles y nuevos destroyers.- Estos buques, dada la situación en que actualmente se encuentran, requieren el empleo de materiales muy especiales, cuyo acopio fue imposible por las mismas circunstancias que dejamos apuntadas anteriormente. A pesar de estas dificultades, la Sociedad presta gran atención al estado de estas obras, procurando su adelanto en todo lo posible”…
En el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1919, se anotaba: …” Destroyers de 34 nudos.- Se está acopiando el material de acero especial para los cascos de estos buques, y están bastante adelantados en la parte de construcción de cuadernas, mamparos, etc.; estos trabajos se llevan también con bastante actividad, esperando que en breve reciban gran impulso las obras de estos cascos
En lo referente á la maquinaria principal, están terminados casi todos los modelos de las turbinas, y han sido fundidas y se están labrando en talleres las turbinas de crucero para los tres buques; también se ha fundido la turbina A. P. de babor del primer destróyer, y está en trabajo la fundición de la caja principal de engranajes.
La maquinaria auxiliar está pedida y acopiado todo el material para las calderas de estos buques.”…
Finalizada la Gran Guerra parecía que se incrementaría el ritmo en la construcción de estas unidades, pero la realidad seria otra. La finalización de las obras se eternizaba. En el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1920, se leía: …” Destroyers de 34 nudos.- Se espera recibir el material especial de acero de alta tensión para imprimir la mayor actividad a estas obras; no obstante están curvadas todas las cuadernas para los tres buques, se han colocado en grada las quillas y empezado a enramar cuadernas, planchas del forro y cubiertas a proa en dos de ellos, y se están recibiendo grandes partidas de materiales para las demás obras de estos buques.
Respecto a la maquinaria para estos destroyers, están terminadas para el primero de ellos las turbinas de alta presión y crucero y elaborándose la de baja presión, muy adelantadas las cajas de engranajes principales y listas para el cortado de dientes las ruedas de engranajes y piñones. Se han recibido los ejes propulsores y hélices, así como el material para los condensadores, teniendo preparados los colectores de las calderas cuyo entubado empezará en breve.
El segundo de estos buques, tiene listas para el montaje todas las partes de las turbinas de alta presión y de crucero, elaborándose las piezas de las de baja presión y en trabajo también las ruedas y piñones de los engranajes, así como sus cajas.
Para el tercer destróyer, están casi terminadas las diferentes partes de la turbina de crucero y en fundición las turbinas de baja presión”…
En el mismo libro, y en el apartado, “Arsenal de la Carraca. Obras para la Marina”, se leía: …” Recibidos también los elementos forjados para los nueve cañones semiautomáticos de 4″ (10,1 cms.), con destino a los tres destroyers de 1.125 toneladas en construcción en Cartagena, se ha efectuado parte del trabajo preliminar para el armado de estos cañones”…
Pasando ahora a las anotaciones en el libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1922, leemos: …”Destroyer ALCEDO.-Este buque fue puesto a flote el 21 de octubre de 1922. Actualmente esta en pleno periodo de habilitación y armamento, teniendo ya embarcadas a bordo las calderas y juegos de turbinas y condensadores, y también la maquinaria auxiliar. Esperamos comenzar las pruebas en uno de los meses inmediatos.
Destroyer VELASCO.- Terminado el armado y remachado del casco en grada, se han probado algunos de sus tanques con agua; está entre manos el barrenado de los arbotantes y bocinas de los ejes, y una vez que se prueben los tanques con aceite esperamos poner el buque a flote en plazo breve.
Está listo el equipo de calderas, así como la mayoría de las maquinas auxiliares, procediéndose en talleres al armado de las piezas de de turbinas y condensadores.
Destróyer JUAN LAZAGA.- Se han comenzado los trabajos de remachado en grada del casco, y como esta muy adelantado en talleres el trabajo de materiales, esperamos poner a flote este buque en uno de los próximos meses.
Las maquinas, calderas, condensadores y auxiliares se encuentran en elaboración en los talleres, en satisfactorio estado de adelanto”…
En este mismo libro de obras se hace mención de la substitución de los tres últimos destructores de la serie por otros tres de la novedosa y excelente clase CHURRUCA. Téngase en cuenta que ya habían pasado 7 años desde el diseño de estos buques y, todavía, quedaban unos cuantos para su entrada en servicio. El diseño ya estaba anticuado, y, comparados con los CHURRUCA, había un abismo en cuanto a efectividad y potencia militar.
Este mismo libro, según hemos comentado, apunta: …”Nuevos Contratos con el Estado. Continuación del 2º Programa Naval. Destroyers y Sumergibles. Conforme con lo preceptuado en la Ley de 17 de febrero de 1915, que autorizaba, entre otros buques, la construcción de seis destroyers y un numero determinado de sumergibles, el Ministerio de Marina, con arreglo al contrato de 24 de febrero de 1916, requirió a la Sociedad para que presentase proyectos de buques de esta clase, con objeto de proceder a la construcción de los tres últimos destroyers del Programa y de otro grupo de seis sumergibles.
Se remitieron a la Superioridad planos y especificaciones de buques de estos tipos, con las mejores disposiciones, para, una vez aprobados, iniciar la construcción de los mismos en los Astilleros de Cartagena.
Examinados los proyectos, fue aprobado el proyecto de destróyer cabeza de flotilla, de unas 1.650 toneladas de desplazamiento y 36 nudos de velocidad, y el proyecto C de sumergible de 1.290 toneladas de desplazamiento y 16 nudos de velocidad.
Fue firmada la orden de ejecución de los cabeza de flotilla el 14 de julio de 1922, y la de los seis sumergibles en 20 de octubre de 1922”…
También de este mismo libro, y sobre las obras en el Arsenal de La Carraca, se anotaba: …”Se prosiguió la construcción de la artillería semiautomática de 10,1 centímetros con destino a los destroyers ALCEDO, VELASCO y JUAN LAZAGA, y de igual armamento para los cañoneros CANOVAS DEL CASTILLO, CANALEJAS y DATO, estando presente en buen estado de adelanto”…
Pasamos ahora al libro Obras. S.E. DE C.N. Resumen de Obras. 1922, en que leemos: …”Cartagena. Obras Militares: Destroyer ALCEDO.- Este destroyer ha terminado sus pruebas oficiales de maquina con excelente resultado, alcanzando la velocidad de 37,21 nudos por hora, o sea una marcha aproximada de tres y un cuarto de nudos superior a la estipulada en el contrato.
Se esta terminando la habilitación de este buque y el montaje de su artillería, para ser entregado a la Marina”…
Ya hemos dicho, en repetidas ocasiones, que estas velocidades, en pruebas de mar, son flor de un día. A todos aquellos entusiastas de estas cifras debo decirles que solo son una anécdota. Como se aprecia en la foto el buque las hizo sin armamento, seguramente con el mínimo combustible, limpio de casco, con especialistas en turbinas, con los mejores aceites lubricantes y, seguramente, con buen tiempo. La realidad, podría jurarlo, es que en carga, con el paso de los años, con algo de mar y el casco algo sucio, seguro que les costaba alcanzar los 30 nudos. De todas formas una bella cabalgada para un hermoso galgo del mar.
También, en el mismo libro, se anota: …”Destroyer VELASCO. Se puso a flote el 17 de junio de 1923. Actualmente, y embarcadas a bordo la totalidad de sus maquinas y calderas, se esta terminando su armamento para comenzar las pruebas inmediatamente.
Destroyer JUAN LAZAGA.- Fue puesto a flote el 6 de marzo del corriente año. Se están montando a bordo las maquinas y calderas, y esperamos verificar las pruebas de mar de este barco en unos próximos meses”…
Como vemos, los retrasos en la construcción de estos buques fueron inmensos. Trataremos, en un futuro próximo, de hacer el seguimiento total de la construcción de estos buques según todos los libros de obras de la S.E. de C.N.
Antes de finalizar su vida sufrieron un recorrido, y transformación de gran importancia. Lo narra Juan Luís Coello Lillo, en su libro Buques de la Armada Española. Los Años de la Postguerra, de Aldaba Ediciones, que ya hemos visto a menudo en esta web. El autor cita: …”Destructores «ALSEDO» y «JUAN LAZAGA»
Ambos buques se encontraron en Cartagena al término de la contienda en una condición lastimosa y de completo abandono, con su maquinaria en mal estado, lo que les había impedido navegar hasta Bizerta en compañía del resto de la flota republicana. Tras una somera reparación a mediados de 1939, fueron enviados a la Factoría de Ferrol para ser objeto de importantes obras de casco y máquinas, siguiendo las mismas líneas que habían presidido la gran reparación efectuada en su compañero de clase «VELASCO» durante los últimos meses de la Guerra Civil.
El 31 de enero de 1940 se ordenó a la DIC que redactase el proyecto y presupuesto completo y detallado de las obras a realizar en los «ALSEDO» y «JUAN LAZAGA«, a fin de unificarlos con el «VELASCO» y permitir la utilización de todos ellos en cometidos de instrucción de artillería y de torpedos. Para ello se les instalarían piezas de 101,6 mm del tipo montado en los acorazados «ESPAÑA«, encamisadas de nuevo y dotadas de un mantelete de nuevo diseño; estos trabajos los llevó a cabo la SECN en sus Talleres de San Carlos. En cuanto a los torpedos, al término de la guerra ambos destructores llevaban embarcados dos montajes dobles de 450 mm dispuestos en las bandas, del tipo antiguo portado por los torpederos de la serie «no 1» a «no 22«, y desprovistos por tanto de transmisión mecánica para su movimiento en dirección. Se decidió conservar los montajes, pero dotándolos de dispositivo mecánico para su puntería y de una dirección de lanzamiento similar a la de los destructores «CHURRUCA» de la primera serie, con su calculador Vickers ajustado a las características del torpedo de 450 mm. En cuanto a armas antiaéreas, debían disponerse cuatro emplazamientos para piezas de 20 mm y montar tres de éstas.
Los operarios ferrolanos habían puesto mientras tanto manos a la obra, procediendo a remover todas las superestructuras de los destructores, incluido el armamento y las chimeneas, tras lo cual se inició una exhaustiva labor de repaso, comprobación, limpieza, ajuste y recorrido de todos los servicios de a bordo, aprovechando para mejorar algunos en lo posible. Las turbinas y calderas fueron levantadas y recorridas a fondo, así como todos los motores y mecanismos auxiliares, incluidos los equipos de navegación; los puentes fueron reconstruidos con mayor altura y amplitud; se instalaron nuevos palos trípodes y dos morteros y un varadero para el lanzamiento de cargas de profundidad; las chimeneas fueron recolocadas, dotando a la proel con una visera guíahumos, y se montó a popa un aparato fumígeno para producir cortinas de humo.
Una vez reconstruidos se presentaron, todavía sin armamento, a realizar las preceptivas pruebas de mar, el «ALSEDO» en julio de 1943 y el «LAZAGA» en septiembre del mismo año, alcanzando nuevamente los 34 nudos de velocidad. Seguidamente se les instaló el armamento antes señalado y se efectuaron los últimos ajustes y comprobaciones, tras lo cual fueron entregados formalmente por el astillero a la Armada el 11 de diciembre de 1943. El coste de la reconstrucción por buque, excluido el armamento militar, superó los ocho millones de pesetas de la época”…
Excelente apunte de esta reconstrucción que prolongo la vida de estos buques hasta 1957, excepto el JUAN LAZAGA que se dio de baja en 1961, cuando ya habían aparecido los destructores lanzamisiles de la clase CHARLES F. ADAMS que ya hemos comentado.
Rogamos la colaboración de los estimados lectores para la obtención de mas fotos, a ser posible inéditas, y solo en gran formato, de estos bonitos y elegantes “cuatro chimeneas”