NI EN AGOSTO CAMINAR, NI EN DICIEMBRE NAVEGAR
Barcos. Modelos Navales con Historia, es el primer libro de mi amigo Pedro Blanco Alvarez. Modelista de primera y escritor de temas maritimos de corazon, lleva el salitre en la sangre, como todo buen santanderino y me dedico su libro de la siguiente manera: “Para Vicente Sanahuja amigo de la mar y los barcos. Con salitre. Pedro Blanco”
En el se estudia la vida real de varios de los modelos realizados por el Sr. Blanco Alvarez, uno de los cuales es el remolcador CONDE DE RUISEÑADA. Su fin fue muy tragico, desaparecio en la mar sin saberse si fue por abordaje u otra causa, y tras el relato, estupendo, extraido del libro citado, aportaremos mas contactos e información que citan la tragedia. Leamos: …”En la actualidad, quizás el trío de imágenes más representativas de la bahía santanderina, entre otras sean: el Palacete del Embarcadero; la Grúa de Piedra y, al sur, el perfil de Peña Cabarga.
Pero durante las décadas de los años cincuenta y sesenta, el Puerto de Santander contaba además con otra efigie con la que lograba un póquer de retratos emblemáticos: el remolcador «CONDE DE RUISEÑADA«.
Tristes evocaciones nos trae a la memoria si pensamos en su luctuoso final; sin embargo, qué agradables resultan los recuerdos en la nostalgia cuando evocamos su figura de remolcador por excelencia de los muelles de Santander.
Fue en 1950 cuando le adquirió la Junta de Obras del Puerto, se compró en Holanda, siendo su propietaria una empresa alemana. Se llamaba entonces «HERKULES» y, aunque su matrícula era el puerto teutón de Bremen, su origen era típicamente americano; concretamente de Brooklyn.
Había sido construido en los Astilleros Continental ShipsYard Co., en Nueva York en 1944, para el remolque y maniobra de los grandes barcos de guerra y embarcaciones de aprovisionamientos que participaban en la segunda conflagración mundial.
De robusta construcción, tenía 26 metros de eslora total, 7 de manga y 2,90 de puntal.
Su motor diesel alcanzaba una potencia de 653 caballos de vapor con un desplazamiento de 269 toneladas, 123 de registro bruto y 22 netas.
Con su imagen neoyorquina y el nombre «CONDE DE RUISEÑADA» (tomó su apelativo del título que ostentaba a la sazón el Presidente de la Cía. Trasatlántica) fue su trabajo el remolcar a los cada vez más numerosos y corpulentos buques que, a fuerza de empujones, acomodaba en los muelles entonces colmados de barcos.
Sustituyó en estas tareas al pequeño remolcador-algibe «SAN MARTIN«, también de la junta, al que cada vez le costaba más tirar de aquellas naves que por sus crecientes tamaños le hacían parecer aún más diminuto.
Varias son las características que de este remolcador cabe resaltar: en primer lugar, su puente de gobierno alto situado en la cubierta del magistral desde donde el patrón con la rueda de cabillas y el telégrafo de máquinas efectuaba las ágiles maniobras.
Su motor propulsor, marca «Clark«, es también de construcción norteamericana, de seis cilindros de dos tiempos con una potencia máxima de 825 CV. Era una versión americanizada del motor Sulzer europeo.
Exclusivos, por supuesto, eran sus dos motores auxiliares utilizados como grupos generadores de corriente eléctrica. Eran motores que habían sido construidos para tractores agrarios, que se encontraban emplazados en una plataforma elástica instalada sobre muelles. Su refrigeración se realizaba por agua dulce a su vez enfriada por agua salada. Su arranque o puesta en marcha se realizaba como en los tractores por medio de baterías.
En 1973 pasó a la Sociedad de Remolques y Servicios, S.A. Con la contraseña de Bergé en la chimenea y el nuevo nombre de «DUENDE» en sus amuras, siguió desempeñando su profesión de remolcador en la Bahía hasta 1978, año en que fue vendido a la Compañía Ibérica de Remolcadores del Estrecho.
Su nuevo lugar de trabajo debería haber sido en el puerto de Algeciras, pero nunca llegó a debutar en aquel empleo.
Rumbo a su nuevo destino, salió en los últimos días del mes de febrero de 1978 con seis hombres de tripulación, tres de ellos vecinos de Santander.
Su última comunicación le sitúa en las costas portuguesas, a la altura del Cabo da Roca, después de rebasar Lisboa… no se volvió a saber nada más de él … sencillamente desapareció.
Después vinieron las conjeturas; cada gente de mar, del puerto o de la ciudad, describían todo tipo de figuraciones, existiendo distintas teorías que abarcaban un sinfín de suposiciones como potenciales causas de su hundimiento.
En los periódicos locales aparecieron durante bastantes fechas artículos en los que se barajaban las diferentes opiniones sobre su desenlace, siendo las creencias que más predominaban el que hubiese sido abordado por un gran mercante, sin descartar como origen del naufragio una posible vía de agua. Lo cierto es que en la zona no hubo temporal ni aparecieron restos del naufragio. Tampoco se conoció ningún buque que en su branque se descubriesen las posibles huellas de un abordaje.
Pese a su ausencia, queda en nuestra memoria el recuerdo imperecedero de su imagen en las aguas del Puerto de Santander, del cual siempre seguirá formando parte”…
Estupendo relato de Pedro Blanco, que, como siempre, estara involucrado en algun trabajo que muestre a nuestra sociedad algun hecho destacado de nuestra Vida Maritima.
Se construyeron un total de 718 remolcadores oceanicos para la U.S. Navy durante la II guerra Mundial. La carga de trabajo se repartio entre 46 astilleros, grandes y pequeños, y se realizaron en acero y madera. Se clasificaron como Large Tugs (LT) o como Small Tugs (ST), y el CONDE DE RUISEÑADA fue de la serie ST. Concretamente del diseño ST-327 E y tuvo la numeración ST-757. Se acabo su construcción en noviembre de 1944, por Consolidated Shipbuilding, de New York, y se vendio a los alemanes en 1949.
Tenia 155 toneladas de registro bruto, una eslora entre perpendiculares de 26,34 metros, una manga de 7,01 metros y un puntal de 2,59 metros.
Buscando en Internet sobre su final, encontre la web Tirando de Driza, estupenda pagina marinera, en la que su autor escribe el post “El Misterio del DUENDE” donde se relata toda la historia de la tragedia. Por suerte para su autor se ponen en contacto con el a traves de los comentarios, muy emotivos todavía, familiares de los desapacidos, que complementan, con información valiosisima, el relato de la catastrofe y el desamparo de los familiares de la tripulación.
Muy completo en estos datos recomiendo este articulo y esta pagina para nuestra biblioteca virtual.
La tripulacion la componian: Aquilino Sanchez Chocarro, Juan Montoya Leon, Marcos Lloret Tonda, Roberto Campelo Peña, Felipe Santillana Castillo y Antonio Gonzalez Lopez. Descansen en paz estos valerosos marinos.
En la edición del diario La Vanguardia, de jueves 16 de marzo de 1978, se leía: …”Huelva. Desaparición de un pesquero desde el pasado dia 6. Barcos y aviones lo están buscando sin resultados positivos
Huelva, 15. — En relación con la supuesta desaparición del remolcador «DUENDE«, del que no se tienen noticias desde las once de la noche del pasado día 6, la Comandancia Militar de Marina de Huelva ha hecho pública una nota, en la que expresa las acciones llevadas a cabo por autoridades de Marina y diversos pesqueros con base en dicho litoral.
«El día 9 de marzo se presentaron en la Comandancia Militar de Marina los representantes de la compañía del remolcador «DUENDE» para interesarse por su situación, ya que habían transcurrido más de 24 horas de la fecha que tenía prevista de arribada al puerto de Huelva.
«La Comandancia comunicó urgentemente tales hechos a las autoridades de Marina y a la subsecretaría de Marina Mercante, montándose los medios necesarios para llevar a cabo un despliegue pesquero basados en el puerto de Ayamonte con misión de efectuar una búsqueda en la zona comprendida entre Cabo San Vicente, y el meridiano de Mazagón, por haberse recibido un mensaje del capitán de la motonave «ASTURIAS«, en el que, sin precisar, daba cuenta de un avistamiento, al parecer, al remolcador «DUENDE«. Ante la duda, se efectuó el despliegue anteriormente narrado.»
«En las horas posteriores se recibió igualmente informe de dos pesqueros que, según las características transmitidas por radio, pudieran ser las del remolcador «DUENDE» dada la poca seguridad y certeza sobre los informes de avistamiento, se continuó la búsqueda por los pesqueros.»
«Posteriormente varios helicópteros de la base naval de Rota y el patrullero ligero de la Marina de Guerra espanyola «CANDIDO PEREZ”, con la misión de explorar desde Cabo de San Vicente hasta Cádiz, llevaron a cabo dicha exploración, con resultado negativo. Colaboraron también en esta búsqueda los pesqueros del puerto de isla Cristina «PABLO VI » y «EL BARTOLO«, de Ayamonte, varios pesqueros también, y uno de los remolcadores remolcadores que habitualmente efectúan trabajos en el puerto de Huelva.»
«La empresa armadora ha colaborado en la búsqueda con diversos medios: una avioneta, con despegue del aeropuerto de San Pablo, para reconocer la zona, hasta Cabo Espice, y el remolcador «MAZAGON» y un avión «Orion«.» «Hasta el momento, los resultados de la búsqueda han sido infructuosos.»
Europa Press”…
Si hacemos una lectura cronologica de los hechos se comprende el enfado de los familiares de la tripulación. “Pequeños hilillos” de nuestros administradores.
Podíamos añadir que su indicativo de llamada era EDAS y su calado 3,- mts. (LOB/58)
Que potencia tenía?
653 o 825 CV
Su motor diesel alcanzaba una potencia de 653 caballos de vapor con un desplazamiento de 269 toneladas, 123 de registro bruto y 22 netas.
Su motor propulsor, marca “Clark“, es también de construcción norteamericana, de seis cilindros de dos tiempos con una potencia máxima de 825 CV. Era una versión americanizada del motor Sulzer europeo.
Un saludo
Estimado Sr.
Muchas gracias por su información
Vicente
Buenas tardes
No tiene que darme las gracias ya que esa información es suya y está en el artículo :
Yo he encontrado ésta información
Diesel 2t 6cyl «Clark Bross» type MD6, 700bhp-515kW @300rpm speed 9,5kn
Las gracias se las tengo que dar yo, por ésta estupenda página web que me hace pasar tan buenos ratos.
Un saludo
Javier
El cadáver del maquinista D. Marcos LLoret apareció en las playas de Sines y fué directamente enterrado en el cementerio de aquel lugar. Pocos días mas tarde, su hijo junto con el armador de la naviera, buscando informaciones por la zona, identificaron el cuerpo que aún portaba la alianza y una medalla con cadena, con sus correspondientes inscripciones.
El cadáver fué transportado a Algeciras donde fué finalmente enterrado.
También aparecieron dos balsas salvavidas y un mueble…sin poder ser atribuidos al «Duende»
LAS BALSAS Y EL MUEBLE SI FUERON IDENTIFICADOS ,LOS RECOGIERON DOS BARCOS DE PESCA ARTESANAL «LOURDES CRISTINA » Y «ENRIQUE » ENTRE EL 7 Y 11 MARZO
El pecio del remolcador Duende, está en la Isla Perceveira frente Sines documento https://www.wrecksite.eu/wreck.aspx?94764
Porque no está introducida la información que puse en el blog. Tengo los documentos oficiales portugueses que reafirman dicha información.
Disculpen lo vi reflejada la información que aporté
Disculpen lo vi reflejada la información que aporté
Durante toda mi carrera de Medicina,allá por los años ´70 del siglo pasado,paseaba con mi pastor alemán dos veces al día por el viejo muelle Calderón del puerto de Santander,y siempre me fijaba en este remolcador.