En el número de Noviembre de 1951 de la revista THE MOTOR SHIP, aparece un artículo sobre la motonave mixta portuguesa SAVE. El artículo titulado A British-Built Ship for Portugal, cita: El buque de carga y pasajeros de dos ejes SAVE. Construido por los astilleros de Grangemouth Dockyard Co., Ltd., para la Cia. Nacional de Navegaçao. Una motonave de carga y pasaje, con doble eje, llamada SAVE, ha sido entregada recientemente por Grangemouth Dockyard Co., Ltd., a la Cia. Nacional de Navegaçao, de Lisboa.
Una foto del buque y dos vistas del interior del buque muestran la inusualmente atractiva decoración de los espacios dedicados al pasaje. Es de interés hacer notar que el SAVE fue abierto a la visita de la gente durante tres días en los que pasaron a visitarlo 4000 personas. La fina artesanía y cuidadosa decoración ha sido ampliamente admirada. El SAVE es el séptimo buque construido para Portugal en Grangemouth en los últimos tres años. Las pruebas se desarrollaron con el buque en lastre y se obtuvo una velocidad media de 13.58 nudos. En las pruebas a plena carga la velocidad fue de 12,85 nudos. El buque mide entre perpendiculares 240 pies, la manga es de 41 pies y tres pulgadas y el puntal de 14 pies y tres pulgadas a la cubierta baja. El peso muerto es de 1330 toneladas y el calado correspondiente es de 14 pies. El SAVE ha sido designado por sus armadores para el servicio en la costa Este africana. Alrededor de 1000 pasajeros nativos, viajando hacia y desde las minas de Rand, pueden ser acomodados en los entrepuentes. Tanto a proa como a popa el buque dispone de servicios higienicos, hay una cocina dispuesta en la parte central del buque que dispone de cuatro rice-boilers eléctricos Carron.
La acomodación para la tripulación nativa esta a popa en donde se encuentran comedores separados para marineros, engrasadores y camareros. El buque dispone de un hospital especialmente equipado, dispensario y cuartos de baño, existiendo un camarote para el enfermero. Camarotes individuales están dispuestos en la cubierta alta en el centro, para los electricistas, el contramaestre, carpintero, store-keeper, panadero, cocinero y asistentes. Los maquinistas tienen los camarotes en la parte de babor de la cubierta del puente y en la parte de estribor hay seis camarotes dobles para pasaje de primera clase.La acomodación. Espejos decorativos y paneles de madera, con luces estilo vela, están dispuestos en el foyer que se extiende a todo lo ancho del buque. Una puerta en el lado de babor permite el acceso al salón, que tiene un determinado numero de mesas separadas y una grande adosada al mamparo. En el costado de estribor, una puerta permite el acceso al salón de fumadores, en donde existe un cocktail bar y una fuente de hielo. El mobiliario incluye escritorios, mesas y sillas. El Capitan dispone de una suite consistente en un espacioso salón de dia, dormitorio y lavabo.
La carga es manipulada por seis winches eléctricos Clarke Chapman, y hay seis puntales de tres toneladas, junto a otro mas capaz para 15 toneladas. El molinete y el cabrestante son también eléctricos, y el servomotor es de la marca Brown Bros. De tipo electro hidráulico. Un gyro compas Sperry esta situado en el puente, y el equipo de este consiste en una ecosonda, un radiogoniómetro, un teléfono altavos de comunicación entre la maquina y el puente, el castillo de proa y el servomotor. Un vista clara de la marca Kent esta situado en el puente.
Dos motores de cinco cilindros British Polar están instalados para la propulsión del buque y cada uno de ellos desarrolla 900 bhp a 280 rpm. El diámetro de los cilindros es de 340 mm y la carrera de 570 mm. Estas maquinas son del diseño estándar de dos tiempos de Polar. La corriente la suministran tres generadores Mirrles y hay también una unidad auxiliar de la marca Newbury. Una disposición de bombas eléctricas Drysdale esta instalada en la sala de maquinas y el equipo incluye también purificadores De Laval para fuel y aceites lubricantes. En vista de que el buque es para servicio costero, los tubos de popa andan dispuestos con engranajes de goma Cutless.
Nadie en el momento que un buque se bota puede sospechar, en esos moemntos felices, que la tragedia pueda acabar con la vida del recién nacido. Sin embargo, el SAVE, tendría un horrible final que marcaria la vida política del estado luso.
Para conocer este final acudimos a la emeroteca virtual del diario ABC, quien en un pequeño apunte narra la tragedia. Leamos: ABC. Martes, 11 de julio de 1961
Más de Doscientos Treinta Muertos al Encallar y Hacer Explosión el Mercante Portugués SAVE.
En medio de una tormenta y del fuego los pasajeros se lanzaban a unas aguas infestadas de tiburones.
Ocurrió el accidente al Sur de Kelimane, frente a la costa de Mozambique.
Lisboa 10. (Crónica de nuestro corresponsal por teléfono). El relativo optimismo que durante el día de ayer informaba todas las noticias referentes a la destrucción del navío portugués SAVE, que encallo el pasado viernes al Sur de Kelimane, en la costa africana de Mozambique, al Norte del puerto de Beira, dando incluso como seguro el salvamento del pasaje y la tripulación, ha desaparecido.
La prensa de esta noche refleja con grandes titulares la magnitud de la catástrofe. No es posible a estas alturas precisar el número de víctimas, pero las Agencias dan cuenta de que el mar arrastra constantemente cadáveres hasta la costa, no obstante estar aquella zona infestada de tiburones.
El SAVE era un navío de carga perteneciente a la flota de la Compañía Nacional de Navegación y se consideraba como una de las unidades más modernas de la marina mercante portuguesa. Desplazaba 12.036 toneladas y tenía una velocidad máxima de 13 millas horarias. Se calcula que el SAVE llevaba entre tripulantes y pasajeros, mas de 600 personas. La tripulación estaba formada por 53 hombres, 19 de los cuales eran europeos. Entre los pasajeros figuraban 350 trabajadores indígenas, que regresaban de las minas de oro de África del Sur. El barco había salido normalmente del puerto de Beira y navegaba a unas 200 millas al Norte de este puerto y a 10 al Sur de Kelimane, azotado por un violentísimo temporal, cuando encallo en un banco de arena. Después de conseguir salvar al barco de la difícil situación, ayer a las ocho se produjo una formidable explosión seguida de incendio. El fuego por un lado y el agua que comenzaba a penetrar dieron perfecta idea de la gravedad de la situación.
El Gobernador general de Mozambique, Almirante Sarmiento Rodriguez, que estaba de inspección por el Norte de la provincia, informado de la situación del SAVE, quiso tener conocimiento de la misma, y en su avión particular sobrevoló durante algún tiempo el lugar en el que el navio ardia. Muchas personas de las que consiguieron salir de a bordo y llegar a tierra hacen relatos impresionantes de la catástrofe contando con expresiones de verdadero horror lo que fueron los instantes pasados a bordo, con el navio encallado, entre el temporal y el fuego, que comenzaba a devorarlo todo.
Una información
que las agencias nacionales comienzan a distribuir en el momento exacto de telefonear confirma la dimensión de la catástrofe. Las personas salvadas hasta este momento oscilan alrededor de las 260. Se considera que mas de 237 pueden darse por muertas o desaparecidas, aunque es lógico que todavía se recuperen aisladamente algunos supervivientes, no ya de los que consiguieron mantenerse a flote mas o menos inverosímilmente, sino también de los que llegaron exaustos a las costas y no han podido ser localizados hasta este momento. En cualquier caso, y en contra de las esperanzas que se mantuvieron durante todo el dia de ayer, la tragedia del SAVE señala un dia de luto y de amargura para la marina mercante lusitana. I. de Echalar.
Los Momentos Cruciales de la Tragedia.- Beira (Mozambique).10. Noticias que se reciben en el lugar del accidente dicen que en la costa hay supervivientes que esperan ser salvados. El barco SAVE embarranco el viernes durante una tormenta cerca de la desembocadura del rio Mahindo. A pesar del mal estado de la mar el barco consiguió salir por sus propios medios del banco de arena, pero el agua entraba por un agujero que tenia en el casco y provoco un cortocircuito que produjo el incendio. Empujado por la fuerza del viento, el SAVE volvió a embarrancar a unos 300 metros de la costa. Los pasajeros y tripulantes no podían luchar contra las llamas.
El domingo se aproximaron al barco lanchas de Beira y Quelimane, pero no pudieron arrimarse al barco por el mal estado del mar. Desde estas lanchas presenciaron como el Capitán del barco, Mario Vieira, ordenaba a los pasajeros que abandonasen el barco.
El primer salvavidas en el que iba una niña de 12 años rezando el Rosario, llego a tierra sin novedad. Pero la segunda fue lanzada por la fuerza de las olas contra el costado del barco, volcando.
Finalmente el combustible y las municiones que se encontraban en las bodegas se incendiaron e hicieron explosión.
Envuelto en llamas el barco, los pasajeros se deslizaban por la cadena del ancla hasta el embravecido mar, consiguiendo algunos llegar a la costa cogidos a cajas o maderas, pero otros muchos se ahogaron al ser arrastrados lejos de la playa por las corrientes.
El Capitán Vieira permaneció en la cubierta dirigiendo las operaciones de salvamento hasta que ya era imposible permanecer allí por el calor. Aun entonces, el Capitán se negó a abandonar el barco y unos cuantos tripulantes le cogieron y le arrojaron al mar por la borda. No se sabe si el Capitán ha logrado llegar a la costa. Como los supervivientes se encuentran en una franja de playa que bordea los terrenos pantanosos, habrán de ser evacuados por aire o por mar. Efe.
Al final fueron 243 las victimas entre los 495 tripulantes y pasajeros que iban a bordo. Toda una tragedia.
Foto 1.- El SAVE en las pruebas de mar. Obsérvese que no dispone de radares. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.
Foto 2.- El foyer. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.
Foto 3.- Una vista del salón comedor. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.

La acomodación para la tripulación nativa esta a popa en donde se encuentran comedores separados para marineros, engrasadores y camareros. El buque dispone de un hospital especialmente equipado, dispensario y cuartos de baño, existiendo un camarote para el enfermero. Camarotes individuales están dispuestos en la cubierta alta en el centro, para los electricistas, el contramaestre, carpintero, store-keeper, panadero, cocinero y asistentes. Los maquinistas tienen los camarotes en la parte de babor de la cubierta del puente y en la parte de estribor hay seis camarotes dobles para pasaje de primera clase.La acomodación. Espejos decorativos y paneles de madera, con luces estilo vela, están dispuestos en el foyer que se extiende a todo lo ancho del buque. Una puerta en el lado de babor permite el acceso al salón, que tiene un determinado numero de mesas separadas y una grande adosada al mamparo. En el costado de estribor, una puerta permite el acceso al salón de fumadores, en donde existe un cocktail bar y una fuente de hielo. El mobiliario incluye escritorios, mesas y sillas. El Capitan dispone de una suite consistente en un espacioso salón de dia, dormitorio y lavabo.
La carga es manipulada por seis winches eléctricos Clarke Chapman, y hay seis puntales de tres toneladas, junto a otro mas capaz para 15 toneladas. El molinete y el cabrestante son también eléctricos, y el servomotor es de la marca Brown Bros. De tipo electro hidráulico. Un gyro compas Sperry esta situado en el puente, y el equipo de este consiste en una ecosonda, un radiogoniómetro, un teléfono altavos de comunicación entre la maquina y el puente, el castillo de proa y el servomotor. Un vista clara de la marca Kent esta situado en el puente.
Dos motores de cinco cilindros British Polar están instalados para la propulsión del buque y cada uno de ellos desarrolla 900 bhp a 280 rpm. El diámetro de los cilindros es de 340 mm y la carrera de 570 mm. Estas maquinas son del diseño estándar de dos tiempos de Polar. La corriente la suministran tres generadores Mirrles y hay también una unidad auxiliar de la marca Newbury. Una disposición de bombas eléctricas Drysdale esta instalada en la sala de maquinas y el equipo incluye también purificadores De Laval para fuel y aceites lubricantes. En vista de que el buque es para servicio costero, los tubos de popa andan dispuestos con engranajes de goma Cutless.
Nadie en el momento que un buque se bota puede sospechar, en esos moemntos felices, que la tragedia pueda acabar con la vida del recién nacido. Sin embargo, el SAVE, tendría un horrible final que marcaria la vida política del estado luso.
Para conocer este final acudimos a la emeroteca virtual del diario ABC, quien en un pequeño apunte narra la tragedia. Leamos: ABC. Martes, 11 de julio de 1961
Más de Doscientos Treinta Muertos al Encallar y Hacer Explosión el Mercante Portugués SAVE.
En medio de una tormenta y del fuego los pasajeros se lanzaban a unas aguas infestadas de tiburones.

Ocurrió el accidente al Sur de Kelimane, frente a la costa de Mozambique.
Lisboa 10. (Crónica de nuestro corresponsal por teléfono). El relativo optimismo que durante el día de ayer informaba todas las noticias referentes a la destrucción del navío portugués SAVE, que encallo el pasado viernes al Sur de Kelimane, en la costa africana de Mozambique, al Norte del puerto de Beira, dando incluso como seguro el salvamento del pasaje y la tripulación, ha desaparecido.
La prensa de esta noche refleja con grandes titulares la magnitud de la catástrofe. No es posible a estas alturas precisar el número de víctimas, pero las Agencias dan cuenta de que el mar arrastra constantemente cadáveres hasta la costa, no obstante estar aquella zona infestada de tiburones.
El SAVE era un navío de carga perteneciente a la flota de la Compañía Nacional de Navegación y se consideraba como una de las unidades más modernas de la marina mercante portuguesa. Desplazaba 12.036 toneladas y tenía una velocidad máxima de 13 millas horarias. Se calcula que el SAVE llevaba entre tripulantes y pasajeros, mas de 600 personas. La tripulación estaba formada por 53 hombres, 19 de los cuales eran europeos. Entre los pasajeros figuraban 350 trabajadores indígenas, que regresaban de las minas de oro de África del Sur. El barco había salido normalmente del puerto de Beira y navegaba a unas 200 millas al Norte de este puerto y a 10 al Sur de Kelimane, azotado por un violentísimo temporal, cuando encallo en un banco de arena. Después de conseguir salvar al barco de la difícil situación, ayer a las ocho se produjo una formidable explosión seguida de incendio. El fuego por un lado y el agua que comenzaba a penetrar dieron perfecta idea de la gravedad de la situación.
El Gobernador general de Mozambique, Almirante Sarmiento Rodriguez, que estaba de inspección por el Norte de la provincia, informado de la situación del SAVE, quiso tener conocimiento de la misma, y en su avión particular sobrevoló durante algún tiempo el lugar en el que el navio ardia. Muchas personas de las que consiguieron salir de a bordo y llegar a tierra hacen relatos impresionantes de la catástrofe contando con expresiones de verdadero horror lo que fueron los instantes pasados a bordo, con el navio encallado, entre el temporal y el fuego, que comenzaba a devorarlo todo.
Una información

Los Momentos Cruciales de la Tragedia.- Beira (Mozambique).10. Noticias que se reciben en el lugar del accidente dicen que en la costa hay supervivientes que esperan ser salvados. El barco SAVE embarranco el viernes durante una tormenta cerca de la desembocadura del rio Mahindo. A pesar del mal estado de la mar el barco consiguió salir por sus propios medios del banco de arena, pero el agua entraba por un agujero que tenia en el casco y provoco un cortocircuito que produjo el incendio. Empujado por la fuerza del viento, el SAVE volvió a embarrancar a unos 300 metros de la costa. Los pasajeros y tripulantes no podían luchar contra las llamas.
El domingo se aproximaron al barco lanchas de Beira y Quelimane, pero no pudieron arrimarse al barco por el mal estado del mar. Desde estas lanchas presenciaron como el Capitán del barco, Mario Vieira, ordenaba a los pasajeros que abandonasen el barco.
El primer salvavidas en el que iba una niña de 12 años rezando el Rosario, llego a tierra sin novedad. Pero la segunda fue lanzada por la fuerza de las olas contra el costado del barco, volcando.
Finalmente el combustible y las municiones que se encontraban en las bodegas se incendiaron e hicieron explosión.
Envuelto en llamas el barco, los pasajeros se deslizaban por la cadena del ancla hasta el embravecido mar, consiguiendo algunos llegar a la costa cogidos a cajas o maderas, pero otros muchos se ahogaron al ser arrastrados lejos de la playa por las corrientes.
El Capitán Vieira permaneció en la cubierta dirigiendo las operaciones de salvamento hasta que ya era imposible permanecer allí por el calor. Aun entonces, el Capitán se negó a abandonar el barco y unos cuantos tripulantes le cogieron y le arrojaron al mar por la borda. No se sabe si el Capitán ha logrado llegar a la costa. Como los supervivientes se encuentran en una franja de playa que bordea los terrenos pantanosos, habrán de ser evacuados por aire o por mar. Efe.
Al final fueron 243 las victimas entre los 495 tripulantes y pasajeros que iban a bordo. Toda una tragedia.
Foto 1.- El SAVE en las pruebas de mar. Obsérvese que no dispone de radares. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.
Foto 2.- El foyer. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.
Foto 3.- Una vista del salón comedor. De la revista THE MOTOR SHIP. 1951.
Un article molt interessant! I l'actitud del capità, poca broma.