Hace muy pocos días el buque de crucero LOUIS MAJESTY recibía el impacto de una ola de 8 a 10 metros de altura en el Mediterráneo que le rompía una de las cristaleras de proa produciéndole bajas humanas. La ola, que no tenia nada de extraordinario en cuanto a altura o potencia, probablemente hizo ceder, por algún fallo estructural, una de las cristaleras situadas en proa produciendo la consiguiente tragedia. Como la información de la televisión y los medios de comunicación normalmente no suele estar contrastada no podemos asegurar que se tratase de una ola anormalmente grande en el temporal que atravesaba el buque, ya que como sabemos, en condiciones de mar gruesa, con olas de 4 a 6 metros de altura, ocasionalmente entraran trenes de olas de 8 a 12 metros, por la propia dinámica de estas. No creo que pueda considerarse una freak wave, o rogue wave, en el puro concepto de esta acepción. 
Curiosamente, un buque que lucio nuestra contraseña, el crucero auxiliar PATRIOTA, tuvo, cuando navegaba bajo pabellón alemán con el nombre de NORMANNIA, un súbito y desagradable encuentro con uno de estos monstruos de la naturaleza que lo dejo clavado en medio del mar, medio desarbolado y con algunos heridos a bordo.
Estos monstruos marinos, repetidamente negados por la comunidad científica y técnica, son tan reales como efímeros, ya que suelen ser producto de un conjunto de circunstancias (generalmente la misma dinámica de las olas) que hacen que su existencia sobre la mar dure poco tiempo; afortunadamente. Normalmente su propio peso hace que se derrumben y diluyan, o bien, la inmensidad del océano hace que sus encuentros con buques –los conocidos- sean escasos en función del trafico existente. Cuando eso ocurre el resultado suele ser trágico o demoledor. Leamos la aventura del NORMANNIA: De New-York para Ñapóles y otros puertos del Mediterráneo, zarpó este hernioso galgo de la línea Hamburguesa Americana, en la tarde del 18 de Enero último. Llevaba 120 pasajeros de 1ª clase, gente rica que iba á buscar las dulzuras de un invierno en Italia ó en el Norte de África; 115 pasajeros de 3ª clase y una tripulación compuesta de 325 personas.
El 19, por la tarde, empezó á soplar fresco el levante, que á la mañana siguiente había adquirido la violencia de un huracán. El domingo 21, á las cuatro de la mañana, se retiró el Capitán Hebich, dejando de guardia al segundo oficial, mister Langue. El tiempo había caído algo, aunque quedaba muy viva la marejada, y el NORMANNIA navegaba por el Gulf-Stream, á unas 760 millas de Sandy-Hook.
A eso de las seis y cuarto de la mañana, el oficial de guardia divisó una ola de grandes proporciones, que se acercaba por la proa; el buque, con todo, la salvó valientemente, ganando airoso la empinada cresta.
El oficial presenció entonces un espectáculo que le heló la sangre en las venas: siguiendo de cerca ala primera ola venía una segunda, enorme, una verdadera montaña de agua de 23 metros de alto, que avanzaba con velocidad de un tren expreso. El buque descendía la pendiente de la primera ola con una inclinación de 45º, y el oficial vio que la mole alcanzaría al NORMANNIA antes de que hubiera tenido tiempo de levantarse. El oficial dio orden al momento á la máquina de parar, y se aferró con toda su fuerza á la baranda del puente, gritando alerta á la gente que había en cubierta. Ya era tiempo: el cáncamo de mar descargó sobre el barco con un estruendo atroz, parándolo en seco, como si hubiera encallado. La cubierta fue barrida completamente; todo eran astillas, planchas fuera de su lugar, rotas muchas de ellas; barras dobladas, destrozados los muebles de la cámara alta, la de conversación y del salón de señoras, y entrando en la bodega muchas toneladas de agua que se precipitó por las claraboyas, escalas y ventiladores.
Los pasajeros, que se hallaban en su mayor parte acostados, se vieron de repente invadidos por el agua, que al ponerse en pie les llegó á algunos hasta el pecho, causándose un pánico y confusión como es de presumir, y que costó no poco calmar, gracias á los esfuerzos del Capitán y oficiales.
Cuando se hubo pasado lista pudo verse que, afortunadamente, no faltaba nadie. Todos se hallaban á bordo, aunque siete personas resultaron lesionadas, siéndolo de alguna gravedad el segundo oficial, M. Ernest Kading. La ola hizo añicos su camarote, en el cual se hallaba, arrojándole al través del salón de señoras, á, gran distancia; se le recogió sin sentido. También tiene heridas graves el camarero Koettschan que, hallándose barriendo las escaleras del salón, fue arrojado por la ola, rodando hasta el extremo del salón.
Las averías sufridas por el buque se estiman en 100.000 dollars, sin contar los daños causados al cargamento de tabaco, cueros y otros géneros.
El Capitán, en vista de la opinión de los oficiales y deseos del pasaje, decidió arribar al puerto de salida, para desembarcar los heridos y componer las principales averías.
Este impresionante relato esta extraido de la REVISTA DE NAVEGACIÓN Y COMERCIO, AÑO VI, NUM. 129 de 15 de marzo de 1894, desde un articulo titulado El Accidente del NORMANNIA.
En un articulo anterior sobre el ALFONSO XII (3º), ya vimos el concepto de crucero auxiliar y anotamos que, durante la guerra del 98, nuestro Estado adapto tres de estas unidades para combate; el METEORO, ya estudiado, el RÁPIDO, anteriormente el vapor COLUMBIA, y el PATRIOTA, ex-NORMANNIA. Vamos a estudiar estos dos últimos y su fugaz paso bajo contraseña nacional sobre todo en la abortada expedición a Filipinas de la flota del Contraalmirante Manuel de la Cámara y Livermore.
Un crucero auxiliar puede estar adaptado a varias funciones, una de ellas es el corso, difícil arte de guerra que como Luis de la Sierra define en su libro CORSARIOS ALEMANES EN LA GRAN GUERRA, 1.914-1.918, con ISBN: 84-261-2147-0, y sacado a la luz por la Editorial Juventud (1ª Edición de 1.985), es:…Y es que la moderna guerra de corso significa, exclusivamente y por encima de todo, el ataque al trafico enemigo, sostenido durante el mayor tiempo posible y sin correr otros riesgos que los inherentes a tan destructiva labor. Y nada mas o…nada menos.
En efecto muy sencillo de escribir, todo un dilema en la vida real, como se ve en la lectura de este emocionante y novelesco libro. El tipo ideal de buque para el corso era un carguero de tamaño medio, discreto de silueta, con buen andar y mejor autonomía, estupendamente artillado y camuflado, ya que la sorpresa y la iniciativa eran sus mejores armas. Otra función era la de plataforma artillera para control y escolta en zonas de riesgo limitado, para lo cual hacia falta algo mas de tamaño, lo cual proporcionaba estabilidad y permitía un mejor artillado. Para desarrollar esta función fueron adaptados multitud de liners ingleses durante las dos grandes guerras, y el RÁPIDO y el PATRIOTA por nuestra Armada, con la colaboración incuestionable de la Compañía Trasatlántica de Barcelona.
De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO de 1.898, AÑO II, NUM. 26, de 15 de Mayo de 1.898, y en referencia a los citados buques, leemos : El RÁPIDO y el PATRIOTA, nuevos avisos de guerra.- Sabido es que el Gobierno español ha adquirido recientemente en Alemania dos buques de mucho andar, con objeto de habilitarlos como avisos de guerra, sus nombres antiguos eran COLUMBIA y NORMANNIA y eran propiedad de la Compañía Trasatlántica Hamburgo-Americana.
Son dichos buques de excelentes condiciones para el servicio a que se les destina, tanto por su gran tonelaje como por su velocidad de 20 millas por hora; serán sin duda eficacísimos auxiliares de nuestra flota transportando víveres, municiones y tropas a las posesiones de Ultramar o a las escuadras en operaciones, cuando de tales elementos necesiten.
Han sido construidos en Inglaterra; el RÁPIDO (COLUMBIA) fue botado al agua en Glasgow en el año 1.890, y tiene 460 pies de eslora, 10.000 toneladas de desplazamiento y maquinas con fuerza de 12.500 caballos. El PATRIOTA (NORMANNIA) procede de los astilleros de Birkenhead; tiene 520 pies de eslora, desplaza 12.000 toneladas y desarrollan sus maquinas una fuerza de 16.000 caballos. El Comandante del RÄPIDO es D. Federico Campaño, Capitán de Fragata, y el del PATRIOTA el de igual clase D. Joaquín Barriere.
Ambos buques ya habían sido seleccionados por la Marina de Guerra Alemana para actuar como cruceros auxiliares, tanto es así que, el NORMANNIA ya había participado en 1.895 en unas maniobras de esta. El PATRIOTA y el RÄPIDO habían sido adquiridos el 8 de Abril de 1.898, y el día 20 del mismo, con la inestimable ayuda de la Trasatlántica, ya formaban parte de la escuadra del Contraalmirante Cámara como Grupo E, escuadrón de reserva.
Fueron artillados con lo que se encontró a mano, y así, según el libro BUQUES DE LA ARMADA ESPAÑOLA A TRAVES DE LA FOTOGRAFIA. 1.849-1.900, escrito por Juan Luis Coello Lillo y Agustín R. Rodríguez González; ISBN: 84-95088-37-1 y NIPO: 076-01-116-7, editado por la Secretaria General Técnica del Ministerio de Defensa, anotamos:… Para su artillado y el de sus dos compañeros se recurrió a todo tipo de piezas depositadas en los arsenales, además de algunas adquiridas apresuradamente en otros países. Así, en el caso del RÁPIDO, este terminaría por montar un numeroso y variado armamento compuesto por: dos cañones Krupp de 15 cm, dos Krupp de 12 cm, dos Armstrong de 12 cm, dos Krupp de 8,7 cm, dos Hotchskiss de 57 mm, cuatro Nordenfelt de 57 mm y dos Nordenfelt de 42 mm; en total, 16 piezas.
Referente al PATRIOTA, el citado libro comenta: También adscrito a la Escuadra de reserva del Almirante Cámara, fue artillado con un total de 16 piezas de los siguientes tipos y calibres: cuatro cañones Armstrong de 15 cm, dos Armstrong de 12 cm, dos Hontoria de 9 cm, cuatro Nordenfelt de 57 mm, dos Sarmiento de 42 mm y dos cañones revolver Maxim de 37 mm.
Visto el repertorio de marcas y calibres debió ser realmente complicada la labor de intendencia y coordinación a bordo.
Existe abundante bibliografía y paginas web que hablan sobre la abortada expedición del Contraalmirante Cámara a Filipinas, nosotros nos limitaremos a dar un apunte sobre la personalidad del citado marino, según un apunte de la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO, AÑO II, NUM. 27, de 1º de Junio de 1.898, en que leemos: Excmo. Sr. D. Manuel de la Cámara y Livermore, Contraalmirante de la Armada.- Pronto zarpara del puerto de Cádiz la segunda Escuadra de operaciones, cuyo rumbo será por ahora un secreto. Se ha confiado su mando al General Cámara, marino distinguido y de probadas energías, que realizara ciertamente las esperanzas que en su valor y pericia fundan el Gobierno y el país.
El Sr. Cámara, nacido en Málaga, ingreso en el colegio naval a los catorce años como aspirante (1.850), siendo nombrado guardia marina de 2ª clase en 1.853, y de primera en 1.856; su primer embarco fue en el navío soberano y paso luego al apostadero de La Habana. En el año 58, después de muchos viajes por el Mediterráneo y el Atlántico, en los cuales presto servicios habilitado de Oficial, ascendió a Alférez de Navío (1.858), asignándosele la corbeta COLON. En Agosto de 1.865 embarco en la VILLA DE MADRID en calidad de transporte para pasar al Pacifico a cubrir bajas de los buques de aquella Escuadra.
Asistió pues, a la campaña del Pacifico y estuvo en las Islas Chinchas, el Callao, Valparaíso y otros puntos; fue ascendido por entonces a Teniente de Navío (1.858) y siguió cruzando aquellas aguas; declarada la guerra por España a la República de Chile, asistió al bloqueo de los puertos enemigos a bordo de la fragata VILLA DE MADRID como oficial de derrota, tomando parte en varios combates, entre ellos el de Abtao, en el que probo su valor, premiándosele tan notables servicios a la patria con el empleo de Comandante de Infantería de Marina y la Cruz de 1ª Clase del Merito Naval.
Durante su larga carrera de marino, ha visitado el Sr. Cámara infinidad de puertos y navegado por casi todos los mares del globo, demostrando siempre especiales condiciones para el mando y singular iniciativa en momentos peligrosos. Obtuvo los sucesivos empleos en las fechas siguientes; Teniente de Navío de 1ª, en 1.868; Capitán de Fragata en 1.876 y Capitán de Navío en 1.887. De Capitán de Navío de 1ª Clase fue nombrado Jefe de la Comisión de Marina en Londres, y ascendido no hace mucho tiempo a Contraalmirante, desempeño el cargo de Director de material del ramo.
Tambien en la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO, pero en el numero 28, de 15 de junio de 1898, se da una pequeña biografia del que fue Comandante del crucero auxiliar PATRIOTA. Veamos: D. Joaquín Barriere y Pérez, Capitán de Fragata; Es un buen marino probado en muchos años de navegación y no pocas acciones de guerra, en las que nunca se le vio esquivar el peligro. Nombrado recientemente Comandante del nuevo crucero auxiliar PATRIOTA, incorporado á la Escuadra de Cámara, irá con él adonde pueda ir el primero.
El Sr. Barriere es natural de Cádiz, y nació el 11 de Diciembre de 1849; á los catorce años ingresó como aspirante en la Escuela Naval Militar, y siendo Guardia marina estuvo en la campaña del Pacífico á bordo de la fragata ALMANSA, asistiendo al bombardeo del Callao. En el año 69 ascendió á Alférez de Navío, y en este empleo le fue concedida la cruz roja de primera clase del Mérito Naval por los servicios que prestó combatiendo á los parciales de D. Carlos en el río Nervión.
Un año antes de ascender á Teniente de Navío (1876), y hallándose á bordo del vapor FERROLANO, tuvo ocasión de mostrar su valor temerario en el siguiente suceso: al atornillar una granada se inflamó la espoleta, percance que produjo en la tripulación tremendo pánico; pero Barriere, sin vacilar un momento, tomó entre sus manos el mortífero proyectil, próximo á explotar, y lo arrojó al agua, evitando con aquel hermoso rasgo de valor una horrible catástrofe. Este hecho fue premiado por el Gobierno con la cruz de primera clase de la Real y Militar Orden de San Fernando. Obtuvo el empleo de Teniente de Navío de 1ª en el año 1888 y el de Capitán de Fragata en el de 1896. Ha mandado, entre otros buques, el cañonero ARAYAT, el aviso MARQUES DEL DUERO, el vapor ASPIRANTE y el cazatorpederos DESTRUCTOR, y los destinos que desempeñó en tierra han sido los siguientes: Ayudante del Arsenal de la Carraca, id. del Arsenal del Ferrol, segundo Ayudante de la Mayoría general (interino) del Ferrol y auxiliar en el Ministerio del ramo.
En 1.899, la Hapag retoma el RAPIDO y lo vuelve a matricular como COLUMBIA.
En 1.901, el PATRIOTA es comprado por la francesa Trasatlantique, que lo bautiza como L´AQUITAINE. Algunas fuentes citan que se hizo la transacción en concepto de pago de deuda.
Sus características técnicas completas, según el LLOYD´S REGISTER OF SHIPPING, eran las siguientes: COLUMBIA; Vapor con casco de acero a doble helice y tres mastiles; señal distintiva, RLKG; luz electrica; Registro bruto, 7241 toneladas; under deck, 5875 toneladas; registro neto, 2299 toneladas; construido en 1889 por Laird, Bros. de Birkenhead; eslora entre perpendiculares, 461,6 pies; manga, 55,8 pies; puntal en bodega, 35,8 pies; 2 maquinas alternativas de triple expansión; diametro de los cilindros, 41, 66 y 101 pulgadas para una carrera de 66 pulgadas; 1.658 caballos nominales; maquinas construidas por Laird, Bros. de Birkenhead.
Respecto al NORMANNIA, y ya como L´AQUITAINE, el LLOYD´S apunta: Vapor con casco de acero a doble helice; señal distintiva, HJLD; luz electrica; 4 cubiertas corridas; registro bruto, 8810 toneladas; registro neto, 2147 toneladas; construido en 1890 por Fairfield Co. Ltd. de Glasgow; eslora entre perpendiculares, 500,0 pies; manga, 57,5 pies; puntal en bodega, 34,0 pies; 2 maquinas de triple expansion; diametro de los cilindros, 40, 67 y 106 pulgadas para una carrera de 66 pulgadas; 1825 caballos nominales; maquinas construidas por Fairfield & Co. Ltd. de Glasgow.
Foto 1.- Estupenda vista del NORMANNIA. Del libro LA EDAD DE ORO DEL VIAJE EN BARCO.
Foto 2.- El crucero auxiliar PATRIOTA. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 3.- El crucero auxiliar RAPIDO. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 4.- Grupo de Oficiales y marineros de dotación en el RAPIDO. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 5.- D. Manuel de la Cámara y Livermore. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 6.- D. Joaquín Barriere y Pérez, comandante del PATRIOTA. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 7.- El trasatlántico COLUMBIA. De la REVISTA DE NAVEGACION Y COMERCIO. AÑO 1898.
Foto 8.- El trasatlantico NORMANNIA. De la REVISTA DE NAVEGACION Y COMERCIO. AÑO 1898.

Curiosamente, un buque que lucio nuestra contraseña, el crucero auxiliar PATRIOTA, tuvo, cuando navegaba bajo pabellón alemán con el nombre de NORMANNIA, un súbito y desagradable encuentro con uno de estos monstruos de la naturaleza que lo dejo clavado en medio del mar, medio desarbolado y con algunos heridos a bordo.
Estos monstruos marinos, repetidamente negados por la comunidad científica y técnica, son tan reales como efímeros, ya que suelen ser producto de un conjunto de circunstancias (generalmente la misma dinámica de las olas) que hacen que su existencia sobre la mar dure poco tiempo; afortunadamente. Normalmente su propio peso hace que se derrumben y diluyan, o bien, la inmensidad del océano hace que sus encuentros con buques –los conocidos- sean escasos en función del trafico existente. Cuando eso ocurre el resultado suele ser trágico o demoledor. Leamos la aventura del NORMANNIA: De New-York para Ñapóles y otros puertos del Mediterráneo, zarpó este hernioso galgo de la línea Hamburguesa Americana, en la tarde del 18 de Enero último. Llevaba 120 pasajeros de 1ª clase, gente rica que iba á buscar las dulzuras de un invierno en Italia ó en el Norte de África; 115 pasajeros de 3ª clase y una tripulación compuesta de 325 personas.
El 19, por la tarde, empezó á soplar fresco el levante, que á la mañana siguiente había adquirido la violencia de un huracán. El domingo 21, á las cuatro de la mañana, se retiró el Capitán Hebich, dejando de guardia al segundo oficial, mister Langue. El tiempo había caído algo, aunque quedaba muy viva la marejada, y el NORMANNIA navegaba por el Gulf-Stream, á unas 760 millas de Sandy-Hook.
A eso de las seis y cuarto de la mañana, el oficial de guardia divisó una ola de grandes proporciones, que se acercaba por la proa; el buque, con todo, la salvó valientemente, ganando airoso la empinada cresta.

El oficial presenció entonces un espectáculo que le heló la sangre en las venas: siguiendo de cerca ala primera ola venía una segunda, enorme, una verdadera montaña de agua de 23 metros de alto, que avanzaba con velocidad de un tren expreso. El buque descendía la pendiente de la primera ola con una inclinación de 45º, y el oficial vio que la mole alcanzaría al NORMANNIA antes de que hubiera tenido tiempo de levantarse. El oficial dio orden al momento á la máquina de parar, y se aferró con toda su fuerza á la baranda del puente, gritando alerta á la gente que había en cubierta. Ya era tiempo: el cáncamo de mar descargó sobre el barco con un estruendo atroz, parándolo en seco, como si hubiera encallado. La cubierta fue barrida completamente; todo eran astillas, planchas fuera de su lugar, rotas muchas de ellas; barras dobladas, destrozados los muebles de la cámara alta, la de conversación y del salón de señoras, y entrando en la bodega muchas toneladas de agua que se precipitó por las claraboyas, escalas y ventiladores.
Los pasajeros, que se hallaban en su mayor parte acostados, se vieron de repente invadidos por el agua, que al ponerse en pie les llegó á algunos hasta el pecho, causándose un pánico y confusión como es de presumir, y que costó no poco calmar, gracias á los esfuerzos del Capitán y oficiales.
Cuando se hubo pasado lista pudo verse que, afortunadamente, no faltaba nadie. Todos se hallaban á bordo, aunque siete personas resultaron lesionadas, siéndolo de alguna gravedad el segundo oficial, M. Ernest Kading. La ola hizo añicos su camarote, en el cual se hallaba, arrojándole al través del salón de señoras, á, gran distancia; se le recogió sin sentido. También tiene heridas graves el camarero Koettschan que, hallándose barriendo las escaleras del salón, fue arrojado por la ola, rodando hasta el extremo del salón.
Las averías sufridas por el buque se estiman en 100.000 dollars, sin contar los daños causados al cargamento de tabaco, cueros y otros géneros.
El Capitán, en vista de la opinión de los oficiales y deseos del pasaje, decidió arribar al puerto de salida, para desembarcar los heridos y componer las principales averías.

Este impresionante relato esta extraido de la REVISTA DE NAVEGACIÓN Y COMERCIO, AÑO VI, NUM. 129 de 15 de marzo de 1894, desde un articulo titulado El Accidente del NORMANNIA.
En un articulo anterior sobre el ALFONSO XII (3º), ya vimos el concepto de crucero auxiliar y anotamos que, durante la guerra del 98, nuestro Estado adapto tres de estas unidades para combate; el METEORO, ya estudiado, el RÁPIDO, anteriormente el vapor COLUMBIA, y el PATRIOTA, ex-NORMANNIA. Vamos a estudiar estos dos últimos y su fugaz paso bajo contraseña nacional sobre todo en la abortada expedición a Filipinas de la flota del Contraalmirante Manuel de la Cámara y Livermore.
Un crucero auxiliar puede estar adaptado a varias funciones, una de ellas es el corso, difícil arte de guerra que como Luis de la Sierra define en su libro CORSARIOS ALEMANES EN LA GRAN GUERRA, 1.914-1.918, con ISBN: 84-261-2147-0, y sacado a la luz por la Editorial Juventud (1ª Edición de 1.985), es:…Y es que la moderna guerra de corso significa, exclusivamente y por encima de todo, el ataque al trafico enemigo, sostenido durante el mayor tiempo posible y sin correr otros riesgos que los inherentes a tan destructiva labor. Y nada mas o…nada menos.
En efecto muy sencillo de escribir, todo un dilema en la vida real, como se ve en la lectura de este emocionante y novelesco libro. El tipo ideal de buque para el corso era un carguero de tamaño medio, discreto de silueta, con buen andar y mejor autonomía, estupendamente artillado y camuflado, ya que la sorpresa y la iniciativa eran sus mejores armas. Otra función era la de plataforma artillera para control y escolta en zonas de riesgo limitado, para lo cual hacia falta algo mas de tamaño, lo cual proporcionaba estabilidad y permitía un mejor artillado. Para desarrollar esta función fueron adaptados multitud de liners ingleses durante las dos grandes guerras, y el RÁPIDO y el PATRIOTA por nuestra Armada, con la colaboración incuestionable de la Compañía Trasatlántica de Barcelona.
De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO de 1.898, AÑO II, NUM. 26, de 15 de Mayo de 1.898, y en referencia a los citados buques, leemos : El RÁPIDO y el PATRIOTA, nuevos avisos de guerra.- Sabido es que el Gobierno español ha adquirido recientemente en Alemania dos buques de mucho andar, con objeto de habilitarlos como avisos de guerra, sus nombres antiguos eran COLUMBIA y NORMANNIA y eran propiedad de la Compañía Trasatlántica Hamburgo-Americana.
Son dichos buques de excelentes condiciones para el servicio a que se les destina, tanto por su gran tonelaje como por su velocidad de 20 millas por hora; serán sin duda eficacísimos auxiliares de nuestra flota transportando víveres, municiones y tropas a las posesiones de Ultramar o a las escuadras en operaciones, cuando de tales elementos necesiten.
Han sido construidos en Inglaterra; el RÁPIDO (COLUMBIA) fue botado al agua en Glasgow en el año 1.890, y tiene 460 pies de eslora, 10.000 toneladas de desplazamiento y maquinas con fuerza de 12.500 caballos. El PATRIOTA (NORMANNIA) procede de los astilleros de Birkenhead; tiene 520 pies de eslora, desplaza 12.000 toneladas y desarrollan sus maquinas una fuerza de 16.000 caballos. El Comandante del RÄPIDO es D. Federico Campaño, Capitán de Fragata, y el del PATRIOTA el de igual clase D. Joaquín Barriere.
Ambos buques ya habían sido seleccionados por la Marina de Guerra Alemana para actuar como cruceros auxiliares, tanto es así que, el NORMANNIA ya había participado en 1.895 en unas maniobras de esta. El PATRIOTA y el RÄPIDO habían sido adquiridos el 8 de Abril de 1.898, y el día 20 del mismo, con la inestimable ayuda de la Trasatlántica, ya formaban parte de la escuadra del Contraalmirante Cámara como Grupo E, escuadrón de reserva.
Fueron artillados con lo que se encontró a mano, y así, según el libro BUQUES DE LA ARMADA ESPAÑOLA A TRAVES DE LA FOTOGRAFIA. 1.849-1.900, escrito por Juan Luis Coello Lillo y Agustín R. Rodríguez González; ISBN: 84-95088-37-1 y NIPO: 076-01-116-7, editado por la Secretaria General Técnica del Ministerio de Defensa, anotamos:… Para su artillado y el de sus dos compañeros se recurrió a todo tipo de piezas depositadas en los arsenales, además de algunas adquiridas apresuradamente en otros países. Así, en el caso del RÁPIDO, este terminaría por montar un numeroso y variado armamento compuesto por: dos cañones Krupp de 15 cm, dos Krupp de 12 cm, dos Armstrong de 12 cm, dos Krupp de 8,7 cm, dos Hotchskiss de 57 mm, cuatro Nordenfelt de 57 mm y dos Nordenfelt de 42 mm; en total, 16 piezas.
Referente al PATRIOTA, el citado libro comenta: También adscrito a la Escuadra de reserva del Almirante Cámara, fue artillado con un total de 16 piezas de los siguientes tipos y calibres: cuatro cañones Armstrong de 15 cm, dos Armstrong de 12 cm, dos Hontoria de 9 cm, cuatro Nordenfelt de 57 mm, dos Sarmiento de 42 mm y dos cañones revolver Maxim de 37 mm.
Visto el repertorio de marcas y calibres debió ser realmente complicada la labor de intendencia y coordinación a bordo.
Existe abundante bibliografía y paginas web que hablan sobre la abortada expedición del Contraalmirante Cámara a Filipinas, nosotros nos limitaremos a dar un apunte sobre la personalidad del citado marino, según un apunte de la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO, AÑO II, NUM. 27, de 1º de Junio de 1.898, en que leemos: Excmo. Sr. D. Manuel de la Cámara y Livermore, Contraalmirante de la Armada.- Pronto zarpara del puerto de Cádiz la segunda Escuadra de operaciones, cuyo rumbo será por ahora un secreto. Se ha confiado su mando al General Cámara, marino distinguido y de probadas energías, que realizara ciertamente las esperanzas que en su valor y pericia fundan el Gobierno y el país.
El Sr. Cámara, nacido en Málaga, ingreso en el colegio naval a los catorce años como aspirante (1.850), siendo nombrado guardia marina de 2ª clase en 1.853, y de primera en 1.856; su primer embarco fue en el navío soberano y paso luego al apostadero de La Habana. En el año 58, después de muchos viajes por el Mediterráneo y el Atlántico, en los cuales presto servicios habilitado de Oficial, ascendió a Alférez de Navío (1.858), asignándosele la corbeta COLON. En Agosto de 1.865 embarco en la VILLA DE MADRID en calidad de transporte para pasar al Pacifico a cubrir bajas de los buques de aquella Escuadra.
Asistió pues, a la campaña del Pacifico y estuvo en las Islas Chinchas, el Callao, Valparaíso y otros puntos; fue ascendido por entonces a Teniente de Navío (1.858) y siguió cruzando aquellas aguas; declarada la guerra por España a la República de Chile, asistió al bloqueo de los puertos enemigos a bordo de la fragata VILLA DE MADRID como oficial de derrota, tomando parte en varios combates, entre ellos el de Abtao, en el que probo su valor, premiándosele tan notables servicios a la patria con el empleo de Comandante de Infantería de Marina y la Cruz de 1ª Clase del Merito Naval.
Durante su larga carrera de marino, ha visitado el Sr. Cámara infinidad de puertos y navegado por casi todos los mares del globo, demostrando siempre especiales condiciones para el mando y singular iniciativa en momentos peligrosos. Obtuvo los sucesivos empleos en las fechas siguientes; Teniente de Navío de 1ª, en 1.868; Capitán de Fragata en 1.876 y Capitán de Navío en 1.887. De Capitán de Navío de 1ª Clase fue nombrado Jefe de la Comisión de Marina en Londres, y ascendido no hace mucho tiempo a Contraalmirante, desempeño el cargo de Director de material del ramo.

Tambien en la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO, pero en el numero 28, de 15 de junio de 1898, se da una pequeña biografia del que fue Comandante del crucero auxiliar PATRIOTA. Veamos: D. Joaquín Barriere y Pérez, Capitán de Fragata; Es un buen marino probado en muchos años de navegación y no pocas acciones de guerra, en las que nunca se le vio esquivar el peligro. Nombrado recientemente Comandante del nuevo crucero auxiliar PATRIOTA, incorporado á la Escuadra de Cámara, irá con él adonde pueda ir el primero.
El Sr. Barriere es natural de Cádiz, y nació el 11 de Diciembre de 1849; á los catorce años ingresó como aspirante en la Escuela Naval Militar, y siendo Guardia marina estuvo en la campaña del Pacífico á bordo de la fragata ALMANSA, asistiendo al bombardeo del Callao. En el año 69 ascendió á Alférez de Navío, y en este empleo le fue concedida la cruz roja de primera clase del Mérito Naval por los servicios que prestó combatiendo á los parciales de D. Carlos en el río Nervión.
Un año antes de ascender á Teniente de Navío (1876), y hallándose á bordo del vapor FERROLANO, tuvo ocasión de mostrar su valor temerario en el siguiente suceso: al atornillar una granada se inflamó la espoleta, percance que produjo en la tripulación tremendo pánico; pero Barriere, sin vacilar un momento, tomó entre sus manos el mortífero proyectil, próximo á explotar, y lo arrojó al agua, evitando con aquel hermoso rasgo de valor una horrible catástrofe. Este hecho fue premiado por el Gobierno con la cruz de primera clase de la Real y Militar Orden de San Fernando. Obtuvo el empleo de Teniente de Navío de 1ª en el año 1888 y el de Capitán de Fragata en el de 1896. Ha mandado, entre otros buques, el cañonero ARAYAT, el aviso MARQUES DEL DUERO, el vapor ASPIRANTE y el cazatorpederos DESTRUCTOR, y los destinos que desempeñó en tierra han sido los siguientes: Ayudante del Arsenal de la Carraca, id. del Arsenal del Ferrol, segundo Ayudante de la Mayoría general (interino) del Ferrol y auxiliar en el Ministerio del ramo.

En 1.899, la Hapag retoma el RAPIDO y lo vuelve a matricular como COLUMBIA.
En 1.901, el PATRIOTA es comprado por la francesa Trasatlantique, que lo bautiza como L´AQUITAINE. Algunas fuentes citan que se hizo la transacción en concepto de pago de deuda.
Sus características técnicas completas, según el LLOYD´S REGISTER OF SHIPPING, eran las siguientes: COLUMBIA; Vapor con casco de acero a doble helice y tres mastiles; señal distintiva, RLKG; luz electrica; Registro bruto, 7241 toneladas; under deck, 5875 toneladas; registro neto, 2299 toneladas; construido en 1889 por Laird, Bros. de Birkenhead; eslora entre perpendiculares, 461,6 pies; manga, 55,8 pies; puntal en bodega, 35,8 pies; 2 maquinas alternativas de triple expansión; diametro de los cilindros, 41, 66 y 101 pulgadas para una carrera de 66 pulgadas; 1.658 caballos nominales; maquinas construidas por Laird, Bros. de Birkenhead.
Respecto al NORMANNIA, y ya como L´AQUITAINE, el LLOYD´S apunta: Vapor con casco de acero a doble helice; señal distintiva, HJLD; luz electrica; 4 cubiertas corridas; registro bruto, 8810 toneladas; registro neto, 2147 toneladas; construido en 1890 por Fairfield Co. Ltd. de Glasgow; eslora entre perpendiculares, 500,0 pies; manga, 57,5 pies; puntal en bodega, 34,0 pies; 2 maquinas de triple expansion; diametro de los cilindros, 40, 67 y 106 pulgadas para una carrera de 66 pulgadas; 1825 caballos nominales; maquinas construidas por Fairfield & Co. Ltd. de Glasgow.
Foto 1.- Estupenda vista del NORMANNIA. Del libro LA EDAD DE ORO DEL VIAJE EN BARCO.
Foto 2.- El crucero auxiliar PATRIOTA. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 3.- El crucero auxiliar RAPIDO. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 4.- Grupo de Oficiales y marineros de dotación en el RAPIDO. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 5.- D. Manuel de la Cámara y Livermore. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 6.- D. Joaquín Barriere y Pérez, comandante del PATRIOTA. De la revista EL MUNDO NAVAL ILUSTRADO. AÑO 1898.
Foto 7.- El trasatlántico COLUMBIA. De la REVISTA DE NAVEGACION Y COMERCIO. AÑO 1898.
Foto 8.- El trasatlantico NORMANNIA. De la REVISTA DE NAVEGACION Y COMERCIO. AÑO 1898.