Si bien las principales potencias marítimas del momento iniciaron sus operaciones con buques acondicionados para efectuar cruceros a mediados del siglo XIX, no fue hasta bien entrado los años veinte del pasado siglo, cuando en España surgieron los primeros tímidos intentos de explotación de esta forma de turismo. En realidad fueron los “Viatges Blaus”, en Cataluña, los que se pueden considerar la primera semilla del crucero moderno organizado, ya que los intentos de la Compañía Trasatlántica, la mayoría de las veces, eran una transformación de los viajes trasatlánticos. En el arco Ártabro, como ya hemos visto, desde principios del siglo XX, los pequeños correitos que hacían la línea Ferrol- A Coruña, aprovechaban los fines de semana para hacer agradables excursiones de unas horas.

La consulta de los libros de información para los pasajeros, principalmente de la Compañía Trasatlántica y de Pinillos Izquierdo y Cia, ya mostraban la invitación al viaje de recreo a través del uso de las líneas regulares. En el LIBRO DE INFORMACION PARA EL PASAJERO, Año 1908 de la Compañía Trasatlántica, en su pag. 38, se lee: …”Los turistas pueden también combinar viajes de recreo de mayor o menor duración, según el tiempo de que dispongan, para visitar distintos puertos de España, Italia, África, Portugal e Inglaterra…..
Excursiones principalmente recomendadas a los turistas: Islas Canarias, Italia, Tánger”…
No seria hasta los años 20, que la Compañía Trasatlántica empieza a dedicar barcos a tiempo parcial y en exclusiva, para la comercialización del viaje de crucero con el objetivo fijado en el mercado anglosajón: de los Estados Unidos e Inglaterra en concreto. Se acondiciono el buque MANUEL ARNUS, como ahora veremos, para los cruceros trasatlánticos desde Nueva York, y para el mercado de Inglaterra, se usa el reconvertido REINA MARIA CRISTINA. Los buques son pintados de blanco, con la chimenea de color amarillo y dibujado en ellas la bandera española.

Del LIBRO DE INFORMACION PARA EL PASAJERO, Año 1926, pags. 65 a 77, condensaremos y traduciremos (ya que estaba relatado en ingles.) los siguientes párrafos, que muestran claramente el intento de desarrollo de este sector del negocio marítimo: …”Visita Romántica a España. Servicio directo de vapor rápido: Nueva York-Sevilla, vía el pintoresco río Guadalquivir, en el magnifico vapor de doble hélice “MANUEL ARNUS”.
El viaje incluye escursiones conducidas a las viejas ciudades españolas: Granada, Córdoba, Madrid, Toledo y El Escorial.
Programa del Crucero (literal).
El s/s MANUEL ARNUS navegara desde Nueva York, y el viaje a Sevilla se hará en 10 días.
A la llegada allí, los primeros tres días serán como sigue:
En Sevilla. Primer día, un viaje a través de la ciudad, visitando los sitios mas relevantes, parques, monumentos, etc.
Segundo día una escursión a Itálica la antigua ciudad romana donde Trajano, Adriano y Teodosio nacieron.
Tercer día, en Sevilla, libre para los viajeros para disfrutar de la ciudad……
Cuarto día. Salida de Sevilla, a las 9 a.m. y llegada a Granada por la tarde.
Quinto día en Granada. Visita a la Alhambra, el Generalife y los principales puntos de interés de la ciudad.
Sexto día, Viaje de Granada a Madrid (Hotel Palace)
Séptimo día en Madrid. Viaje a través de la ciudad en automóviles, visitando los principales monumentos, plazas, museos etc.
Octavo día, escursión a Toledo.
Noveno día, escursión a El Escorial.
Décimo día, se deja libre al pasajero para que disponga de su tiempo en Madrid como guste.
Onceavo día, salida de Madrid a las 8 a.m. para Córdoba, llegando después de comer. Visita a Córdoba, y cena en la ciudad. A las 0830 p.m. salida para Sevilla a donde se llegara a las 11 p.m.
Atracciones del viaje.
La Compañía Trasatlántica, organizando este crucero de temporada desde los Estados Unidos a España, desea ofrecer al turista americano, quien día a día ansia cada vez mas conocer Europa, una oportunidad de visitar mejor un país, que la tradicional de visitar varios puertos durante unas pocas horas sin la oportunidad de penetrar en el país y conocer Castilla, el corazón de España”…
A continuación glosa las virtudes de cada una de las ciudades a visitar, y llegamos al apartado de: …”Información del Crucero.
Las escursiones en tierra en España, serán hechas bajo la supervisión de Thomas Cook & Son. y un representante de esta firma, acompañara a todos los pasajeros durante todo el crucero.
Los pasajeros interesados deberán obtener reservas tan pronto como sea posible en las oficinas de la Compañía Trasatlántica en Nueva York, o en Thomas Cook & Son.
Para asegurarse la reserva, se requerirá el abono del 25 por ciento del valor del pasaje, y el pago del resto se efectuara al menos cuatro días antes del inicio del crucero.
La Compañía Trasatlántica se reserva el derecho de cancelación de la reserva para los viajeros que no hayan cumplido con los requisitos mencionados”…
También se hacen interesantes comentarios referentes a los derechos de los pasajeros, pasaportes, equipajes, sugerencias en el vestir y alquiler de tumbonas.
La fuerte presencia anglosajona en esta iniciativa, se puede ver también en la recomendación a los pasajeros de disponer de travellers cheks, de Thomas Cook, canjeables a bordo y en los hoteles por dinero del país de origen.
Respecto al REINA MARIA CRISTINA, y según el libro, LA MARINA CANTABRA. DESDE EL VAPOR, Vol III, pag. 238: (en 1.928) …”El REINA MARIA CRISTINA, tras una parcial reforma, fue dedicado a efectuar cruceros de turismo desde Santander y Pasajes a Southampton. Iba pintado de blanco y con su airosa proa de violín y su chimenea pintada de amarillo, era como un gran yate de recreo fondeado en aguas de Cowes…
Al cumplirse el cincuentenario de la Compañía, acaba sus servicios y se vende para chatarra”…
Hasta aquí la Compañía Trasatlántica, con sus operaciones centradas en el Atlántico. ¿Pero, habían sido estos los primeros intentos de iniciar cruceros en la Compañía? No. Al vapor BUENOS AIRES, nada más ser recibido, le toco el honor de ser uno de los primeros buques del Estado en hacer de buque de crucero. En el diario LA VANGUARDIA, edición de 21 de julio de 1888, aparecía un interesantísimo anuncio en el que se ofrecía un viaje de recreo a bordo del vapor BUENOS AIRES. El anuncio era el siguiente: Compañía Trasatlántica. (Antigua López y Cia.)
Viaje de Recreo desde Barcelona a Nápoles y Viceversa. Con escalas en Génova y Marsella. En el veloz y grandioso vapor-correo español BUENOS AIRES, de 9.000 toneladas, capitán Don José Venero.
Tiene lujosos salones de música, de conversación y de fumar, elegantes comedores, confortables y espaciosos camarotes, iluminado todo con luz eléctrica.
Saldrá de este puerto el 22 del mes corriente, a las cuatro de la tarde, haciendo su viaje con arreglo al siguiente itinerario.
Marsella. Llegada, Julio 23, a las 7 de la mañana. Salida, julio 28, a las 7 de la tarde. Estancia 5 días, 12 horas.
Nápoles. Llegada, julio 30, a las 8 de la mañana. Salida, agosto 5, a las 5 de la tarde. Estancia, 6 días 9 horas.
Génova. Llegada, agosto 7, a las 7 de la mañana. Salida, agosto 9, a las 5 de la tarde. Estancia, 2 días 10 horas.
Marsella. Llegada, agosto 10, a las 12 de la mañana. Salida, agosto 11, a las 2 de la tarde. Estancia, 1 día y 2 horas.
Barcelona. Llegada, agosto 12, a las 7 de la mañana. Duración del viaje 21 días.
Billetes de ida y vuelta, incluida manutención y alojamiento a bordo en los puertos: En primera cámara, 350 Pts.; en segunda, 250 id; y en sollado, 100 id.
La estancia en Nápoles permite a los Sres. Pasajeros hacer excursiones cómodas y económicas a Roma, Pompeya, Vesubio, Sorrento, Capri, Castellamare, etc., etc., y visitar el magnifico museo y palacio de aquella grandiosa ciudad lo mismo que en Génova.
Estos vapores los despachan en Barcelona los Sres. Ripoll y Compañía, Plaza Palacio, esquina a la calle de la Marquesa”…
Es decir, curiosamente, a finales del siglo XIX, y aunque solo fue una anécdota en si mismo, un buque hacia un crucero, muy parecido a los que actualmente realizan cientos de buques al año, que era económicamente viable y que se anticipaba en cien años a la realidad actual. Por otra parte, los cruceros a Inglaterra y Estados Unidos fueron un completo fracaso.
Veamos ahora la Compañía Trasmediterránea, que prácticamente monopolizaba los servicios regulares en el Mediterráneo, como se introdujo en este mercado gracias a iniciativas privadas, de gran interés histórico. Nunca fueron iniciativas de la compañía, sino de operadores culturales catalanes que fletaron sus buques.

Del libro EL PORT DE SANT FELIU DE GUIXOLS. RECORREGUT HISTORIC AMB MOTIU DEL SEU CENTENARI. Editado por Estudis Guixolencs, y cuyo ISBN es 84-932263-4-3, y que se dito en 2004, traducimos del catalá los siguientes apuntes: …”Las primeras excursiones marítimas. Los Viajes Azules.
Una de las primeras formas organizadas de turismo que dejaron sentir su presencia en Sant Feliu, fueron los Viajes Azules, las excursiones marítimas que, desde Barcelona, organizaba el guixolenc Jaume Marill. En aquellos momentos ya existía una línea de autocar, esponsorizada por la urbanización de S´agaro, que unía Sant Feliu con Barcelona, y eso había favorecido la afluencia de visitantes durante los primeros años veinte. Los Viajes Azules en cambio, tenían el aliciente de ofrecer un viaje por mar, y así impulsaron la presencia en el puerto de Sant Feliu de los grandes vapores que desembarcaban mucha gente.
A partir de 1.927 se organizaron diversos cruceros marítimos que zarpaban en domingo o día festivo.
Centenares de barceloneses y gerundenses establecidos en la capital catalana salían de buena mañana, a bordo de un moderno vapor de la Compañía Trasmediterránea – J.J. SISTER, INFANTA BEATRIZ, REY JAIME I, REY JAIME II, PRINCIPE ALFONSO, etc.– bordeaban la costa, contemplaban los paisajes marítimos, y escuchaban diversos conciertos a bordo. Cuando llegaban a Sant Feliu o a la playa de Sant Pol, se les ofrecían diversas audiciones. Llegando a Sant Feliu, por ejemplo, se tenía que escuchar Juni, de Juli Garreta. De otra banda, los excursionistas solían quedar altamente satisfechos de admirar las múltiples bellezas de la Costa Brava, hasta las Islas Medas. Los viajes representaban para la ciudad la concurrencia de masas de personas que se repartían por el promontorio del Salvamento y la explanada del puerto, algunas de las cuales comían en los restaurantes de la ciudad; los Hoteles de las Noies, de La Marina, Murlá, y las fondas Telm y la de Sever Mestres. Alguno de los viajes reporto a la ciudad unas 1.500 personas –1.285 pasajeros, 215 periodistas, personal del buque y convidados- De otra parte ciertos visitantes disponían de cierta popularidad, como Lluis M. Millet y su Orfeón Catalán, o el escritor Joaquim Ruyra, de quien se recomendaba la compra y lectura de sus libros, en el bar del buque”…

Fueron pues, los Viatges Blaus, el germen del mercado del crucero turístico organizado en nuestro Estado.
Algunos cruceros organizados fueron de especial relevancia, como el Crucero Universitario por el Mediterráneo (Verano de 1.933), espléndidamente narrado según el libro documento editado por la Asociación de Amigos de la Residencia de Estudiantes de la Universidad Complutense de Madrid, donde se lee: …”En el verano de 1.933 tuvo lugar un Crucero universitario organizado por Manuel García Morente, decano de la Facultad de Filosofía y Letras de Madrid, que agrupo a 188 catedráticos, profesores y alumnos.
La relevancia de este viaje, sin precedentes en la vida académica española del momento, estriba en muchos de los nombres de sus integrantes y en el carácter innovador del proyecto: un curso de Humanidades a bordo del barco CIUDAD DE CADIZ y un estudio, in situ, de las fuentes de la civilización europea”…
Recomendamos un libro excepcional, editado por la Universitat de Barcelona, referente a esta expedición, titulado EL SUEÑO DE UNA GENERACION, EL CRUCERO UNIVERSITARIO POR EL MEDITERRANEO DE 1933, escrito por Francisco Gracia Alonso y Josep Maria Fullola y Pericot, su ISBN es 84-8338-483-3, y se edito en 2006.
Otro tímido intento de explotar un buque en cruceros turísticos ocurrió en Huelva, y el protagonista fue el pequeño ferry FRANCISCO MONTENEGRO. Lo narra Ana Maria Mojarro Bayo, licenciada en Geografía e Historia por la Universidad de Sevilla, en su tesis de licenciatura, EL PUERTO DE HUELVA DURANTE LA DICTADURA DE PRIMO DE RIBERA (1.923-1.930), cuyo ISBN es 84-688-2512-3, que fue editado por la Autoridad Portuaria de Huelva y patrocinado por la Fundación El Monte. La autora cita: …”Efectivamente, el transbordador FRANCISCO MONTENEGRO se convirtió en el protagonista de una experiencia turística en el Puerto de Huelva. El transporte de viajeros, vehículos y, en general, de todas las mercancías entre los muelles de la Punta del Sebo y la Rábida tenía cada vez mayor importancia en los años veinte y se esperaba un acrecentamiento, debido al turismo que había de atraer la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929, y que se creía que persistiría como consecuencia de la propaganda del certamen en todo el continente americano.
Además, se llegó a proyectar una corriente de tráfico entre Lisboa, Sevilla y Huelva, estudiándose, incluso, que los vapores navegaran directamente desde América al Puerto onubense. Desde Sevilla podrían venir en automóvil los visitantes de la Exposición, en el mismo día, hasta Huelva, La Rábida, Palos, Moguer y vuelta. Así, los americanos que asistieran a la Exposición podrían acudir a los lugares colombinos y, entre éstos, al Puerto de Huelva: «[…] cuyas magníficas condiciones para la navegación y para el establecimiento de industrias serán apreciadas directamente por numerosos hombres de negocios de aquel país»”…
También en las Canarias, pero mucho mas tarde cronológicamente “Hay un episodio de la historia marinera del vapor LA PALMA poco conocido. Se trata del viaje extraordinario realizado del 17 al 22 de agosto de 1951 a la isla de Madeira, con una expedición de pasajeros tinerfeños en su mayoría, que lo fletaron para un viaje de placer, siendo, que sepamos, el primer crucero de turismo del citado barco y de los históricos correíllos negros” , según relata Juan Carlos Díaz Lorenzo, en su web DE LA MAR Y LOS BARCOS, en el articulo “Viaje turístico del vapor “LA PALMA” a Madeira (1951)”
En el artículo citado se ilustra una excelente foto del buque en aguas portuguesas.
Curiosamente, y aunque no con nuestra bandera, unos barcos extraordinarios, los de Yeoward, popularizaron enormemente los viajes de cruceros en las Canarias treinta años antes…para los ingleses. Sunward by Yeoward fue el lema, junto con el rostro de Jane Harlow, lo que represento el éxito en la promoción de estos cruceros. Obviaremos este tema, ya estudiado en esta web, al no corresponder a nuestra contraseña.
Debido a la importancia de los Viatges Blaus les dedicaremos un artículo en exclusiva, en donde ampliaremos datos y estudiaremos en profundidad este fenómeno social.
Aquellos tímidos intentos, dieron paso a la hoy floreciente industria del crucero en nuestro país.